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Reportaje:

La cintura política es muy ancha

Uno de cada dos parlamentarios andaluces está por encima de los límites normales de peso

Un grupo de 260 personas, entre diputados y trabajadores del Parlamento de Andalucía, se prestó el pasado 14 de octubre a hacerse un análisis médico para medir el riesgo de padecer enfermedades cardiovasculares. Los resultados de aquella experiencia, titulada Jornada de Prevención De la cintura al corazón, han sido contundentes: el 54% de los parlamentarios corre este riesgo y tiene sobrepeso.

La Comisión de Salud del Parlamento acogió con "entusiasmo" esta iniciativa de las Sociedades Española y Andaluza de Cardiología y del Corazón, cuyo objetivo es utilizar los datos de la Cámara para concienciar a la sociedad. "Campañas como ésta son importantes para esta institución, sobre todo, si se actúa como eco para el resto de la sociedad", afirmó ayer en la sede parlamentaria la presidenta de la Comisión de Salud de la Cámara Baja, Francisca Medina.

El dato más alarmante revela que de las 75.000 personas que padecerán infarto de miocardio este año una tercera parte morirá antes de recibir atención en un centro sanitario. "Esta gente morirá antes de ser atendida. La única forma de actuar contra esto es la prevención", asegura José María Cruz Fernández, vicepresidente científico de la Fundación Española del Corazón y jefe de Servicios de Cardiología en el Hospital Virgen Macarena.

Esta prevención se podría realizar con medidas simples como el ejercicio o la comida sana. Pero muchos de los parlamentarios andaluces no cumplen estos pequeños requisitos, a"como la media de la sociedad andaluza", advierte el doctor Cruz Fernández.

La fórmula de medición del sobrepeso y, con él, del riesgo de padecer presión arterial alta o colesterol, ha sido el cálculo del perímetro de la cintura de cada diputado, el principal indicador de obesidad abdominal, según los expertos. "Es algo que se hace de forma tan sencilla como coger una cinta métrica", resuelve sonriente el doctor.

En función de esto, un hombre tendría sobrepeso abdominal si su cintura pasase de los 102 centímetros y una mujer, si superase los 88. Los datos del Parlamento son claros: el 63% de los hombres superan esa medida. En el caso de las mujeres la cifra es menor, sólo el 34% tiene sobrepeso. La media, del 54%, es idéntica a la de la sociedad andaluza. "Las mujeres se cuidan más. Salvo en los datos sobre el tabaco - el 40% de las mujeres fuman, frente al 32% de los hombres-, las diputadas ganan por goleada", advierte Cruz Fernández. Estos son los datos según las medidas actuales. No obstante, podrían ser cifras más pesimistas si se hiciera bajo el metro de la Unión Europea, que fija en 95 y 80 centímetros los límites para hombres y mujeres.

Los datos demuestran que en la Cámara Baja el 32% de los hombres tiene la presión alta y el 24% padece colesterol elevado, frente al 13% y al 11% de las mujeres, respectivamente. En cuanto al índice de masa corporal, fórmula tradicional de medición del sobrepeso, una de cada tres mujeres y dos de cada tres hombres pesan más de lo debido en la Cámara andaluza.

La razón de esta diferencia, estima el médico, es que, en muchos casos, la gordura de la barriga no es vista como negativa. "Eufemísticamente, los varones hasta presumen de ella y dicen cosas como 'con lo que me ha costado criarla...', pero no se dan cuenta de lo peligroso que es no cuidarse", se lamenta el médico. "Los políticos alardean de cintura política, que es la que les puede librar de muchas jornadas, pero la cintura anatómica es la que les puede alargar la vida", concluye Cruz Fernández.

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