Absuelto el español acusado de asesinar a una fiscal en Bolivia

Javier Villanueva, el sevillano acusado de atentar contra la fiscal boliviana Mónica von Borries en febrero de 2004, quedó ayer en libertad sin cargos. Se enfrentaba a una petición fiscal de 30 años, pero el tribunal que lo juzgaba en Santa Cruz de la Sierra (Bolivia) lo dejó ayer en libertad por falta de pruebas.

Con un abrazo a su padre terminó ayer en Santa Cruz de la Sierra (Bolivia) el calvario de Javier Villanueva, sevillano de 29 años, acusado de matar con un coche bomba a la fiscal Mónica von Borries. Villanueva, emocionado, abrazó a su padre, Francisco, tras escuchar cómo el Tribunal Cuarto de Sentencia lo absolvía.

Villanueva expresó su enorme alegría y "una indescriptible sensación de libertad, aunque todavía no la tengo", dijo. "Siento un enorme desahogo pues pude demostrar mi inocencia y ello era fundamental para mí ante mi familia, mis amigos y mi país, que me han respaldado este tiempo", explicó a este periódico. "Han sido dos años de lucha, de humillaciones y de maltrato pero no nos hemos rendido", añadió.

Villanueva fue detenido el 28 de abril de 2004. La Fiscalía de Bolivia le consideraba integrante de una banda, liderada por el italiano Marco Marino Diodato, que supuestamente había asesinado a la fiscal antidroga un mes antes con una bomba en su coche.

Más de un año y medio estuvo encerrado en el penal de Palmasola (Santa Cruz). En noviembre de 2005 logró salir de la prisión, considerada una de las más peligrosas de Bolivia, y que le permitieran vivir bajo arresto domiciliario con cuatro policías que le vigilaban 24 horas en un apartamento.

Cinco personas -dos jueces profesionales y tres populares- debían decidir si Villanueva y cuatro personas más, dos de ellas huidas, eran culpables. Por unanimidad, el tribunal decidió dejar en libertad a Villanueva y al boliviano Fredy Hurtado. Ricardo Borba fue condenado a 15 años de prisión.