Un juez de Palma da a una lesbiana la pensión de viudedad por la muerte de su compañera
El juez de lo social de Palma, Juan Gabriel Álvarez, ha dictado una sentencia que reconoce a una mujer, Rosana Hernández, el derecho a percibir la pensión de viudedad tras la muerte de su compañera Laura Galante, fallecida en 2002, antes de promulgarse en 2005 la ley de matrimonio entre personas del mismo sexo.
La pareja se formó en Madrid en 1992 y en aquel año se trasladó a vivir a Palma, donde en 2001 se inscribió en el registro municipal de parejas de hecho. El Instituto Nacional de la Seguridad Social ha recurrido la decisión judicial.
"El día antes de morir Laura me animó a batallar por mis derechos. Vivimos como pareja o matrimonio. No nos habíamos casado porque no se había promulgado la ley", explicó ayer por la tarde Rosana. "Me nombró su heredera pero no hay herencia", señaló Rosana, que es profesora y realizadora teatral. Laura fue monitora de asistencia a drogodependientes en la Cruz Roja.
El juez, para afirmar el derecho a percibir la prestación pública, reseña el vínculo entre Rosana y Laura, así como su convivencia durante doce años. También resalta la circunstancia de haberse dado de alta en el registro municipal y, subraya que ambas mujeres no pudieron contraer matrimonio porque no estaba prevista legalmente esta posibilidad.
