Cuarta suspensión del macrojuicio de ETA en lo que va de año, ahora por enfermedad
Marlaska notifica el procesamiento al etarra Parot y éste alega que "todo es mentira"
Una nueva suspensión del macrojuicio contra el entorno de ETA. Con ésta son cuatro en lo que va de año, sin que desde diciembre se haya avanzado ni un milímetro. Ayer la razón alegada fue la enfermedad de varios de los acusados, uno de ellos, Iñigo Elkoro, intervenido de urgencia por un problema intestinal e ingresado en un hospital de San Sebastián y que podría ser excluido del proceso y juzgado más adelante si prospera la petición del fiscal. Mientras tanto, al etarra Henri Parot le fue notificado su procesamiento por exigir a la dirección de ETA que atentase contra "objetivos más vitales".
El macrojuicio contra el entorno de ETA lleva dos meses en un callejón sin salida y con un futuro incierto. La defensa intentó a toda costa que fuera suspendido desde su inicio, el 21 de noviembre del año pasado, y llegó incluso a recusar a los tres magistrados que integran el tribunal por falta de imparcialidad, pero sin conseguirlo. La razón de este interés en suspender la vista es que los acusados creen que si ETA anuncia en breve que abandona la violencia, ellos pueden beneficiarse del previsible acuerdo, lo que sería mucho más complicado si ya estuvieran condenados.
Aunque todas las peticiones de suspensión habían sido rechazadas por el tribunal durante 2005, desde el 9 de enero, fecha prevista para la reanudación de las sesiones este año, las suspensiones se han acumulado unas sobre otras. Las razones han sido variadas, pero casi todas relacionadas con posibles vulneraciones del derecho de defensa. Ayer, sin embargo, la razón esgrimida fue de carácter médico.
Uno de los imputados, Iñigo Elkoro, ha tenido que se intervenido quirúrgicamente por un problema intestinal y se encuentra internado. No se recuperará en dos o tres meses y por ello podría ser juzgado por separado en un futuro.
Otro de los acusados, Mikel Gotzon Egibar, padece una posible neumonía. El tribunal ordenó al forense que le examinase y éste recomendó que se le hiciese una radiografía en un hospital. Fue trasladado, pero una hora después, el forense señalaba que todavía no había sido atendido por lo que la vista se suspendió hasta hoy.
El tribunal deberá decidir, a la vista del informe forense, si reanuda la vista o la suspende de nuevo. Y ello, porque, además, otros tres acusados han alegado lesiones, aunque el forense ha certificado que pueden estar presentes en la sala, y una letrada, Arantza Zulueta, defensora del imputado que tiene que declarar, Xabier Alegria, padece gripe.
El caso es que Alegria ha estado en cinco ocasiones a punto de declarar, sin llegar a hacerlo porque la vista se ha suspendido. El 20 de diciembre habían declarado 21 de los 56 acusados. Casi dos meses después, no ha declarado nadie más. El panorama del juicio no puede estar más borrascoso.
Mientras tanto, también en la Audiencia Nacional, pero ante el juez Fernando Grande-Marlaska, compareció el etarra Henri Parot. El magistrado le notificó el nuevo auto de procesamiento contra él por delitos de integración en organización terrorista, conspiración o proposición para un delito de estragos terroristas o de atentado por lo que el etarra podría ser condenado a penas que oscilan entre un máximo de 32 años y un mínimo de nueve años de prisión. Ello impediría que fuera excarcelado en 2011.
Parot dirigió en 2001 una carta a la dirección de ETA en la que exigía una mayor dureza en los atentados de la banda y que atacase "objetivos más vitales para el Estado". Ayer, en un acto que duró cinco minutos, dijo ante el juez: "Todo es mentira", y acto seguido dijo que no tenía nada más que decir y se negó a declarar.
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