La periodista de EE UU secuestrada en Irak pide ayuda en un nuevo vídeo

La periodista estadounidense secuestrada en Irak desde hace más de un mes apareció en un nuevo vídeo, emitido ayer por una cadena privada de Kuwait, en el que pide ayuda para que pueda ser liberada. Jill Carroll, de 28 años y que cuando fue secuestrada colaboraba en Bagdad con el diario The Christian Science Monitor, aparece cubierta con un velo musulmán y su estado de salud es aparentemente bueno.

"Estoy con los muyahidines. He enviado una carta escrita de mi puño y letra. Estoy aquí, me encuentro bien. Por favor hagan lo que les piden", asegura la periodista en las imágenes emitidas por Al Rai.

"Tienen que darles lo que piden tan pronto como sea posible. Tenemos muy poco tiempo. Por favor, hay que moverse con rapidez", agrega Carroll, que asegura que el vídeo se grabó el 2 de febrero. La carta llegó a la cadena kuwaití junto con el vídeo, pero Al Rai no tiene la intención de difundir su contenido. "A causa del material sensible que contiene, hemos entregado la misiva a las autoridades kuwaitíes", dijo el presidente de la cadena, Jasem Boodai.

Contacto con la familia

Jill Carroll, que habla árabe con fluidez, fue secuestrada en Bagdad el pasado 7 de enero por un grupo armado, que asesinó a su conductor. Los responsables del diario para el que trabajaba, The Christian Science Monitor -uno de los periódicos más prestigiosos de Estados Unidos-, han pedido ser informados sobre el contenido de la carta. "Estamos esperando que nos cuenten el contenido de la carta de Jill. Estamos en contacto con su familia y hacemos todo lo posible para que sea liberaba cuando antes", dijo el director del Science, Richard Bergenheim.

En un vídeo emitido por la cadena Al Yazira el 17 de enero, Carroll aseguró que sus captores exigían la liberación de las mujeres detenidas por EE UU en Irak y que la matarían en caso de que no se cumpliesen sus condiciones. El Ejército de EE UU puso ayer en libertad a cinco mujeres presas el pasado 26 de enero, aunque insistió en que esta excarcelación no está relacionada con el secuestro. Las presas encarceladas en el momento de su captura sumaban nueve. La periodista volvió a aparecer en un vídeo el 30 de enero en el que reiteraba las exigencias de sus secuestradores.