El excedente de tomate condiciona la siembra de la campaña
Organizaciones agrarias, cooperativas e industrias mantienen posiciones enfrentadas para la contratación de las superficies destinadas al tomate para concentrado en la próxima campaña. Desde las industrias se alega la existencia de elevados excedentes de la temporada anterior y unas cotizaciones bajas en el mercado. En consecuencia, ofrecen unos contratos de siembra a precios en el entorno de cuatro céntimos de euro más una ayuda comunitaria penalizada de sólo otros 2,2 céntimos de euro por kilo.
Para los cultivadores, con esos precios, no es rentable un cultivo que supone unas 40.000 hectáreas, especialmente en Extremadura y Andalucía y que afecta también al valle del Ebro, Murcia o Castilla-La Mancha.
La UE tiene una cuota de producción de tomate para concentrado de 8.653.328 toneladas tras la ampliación a los países del Este. De ellas, 1.238.606 corresponden a España. Para ese volumen de producción existe una ayuda comunitaria de 34,50 euros por tonelada. Si un país supera la cuota, pero no se llega en conjunto al techo comunitario, es posible una compensación de producción para percibir las subvenciones.
En los últimos años, mientras países como Grecia, Francia o Portugal tuvieron unas producciones por debajo de sus cuotas, Italia y, sobre todo, España, rebasaron ampliamente su cupo incurriendo en duras penalizaciones.
En el caso de España, por el aumento de las industrias transformadoras en Extremadura y Andalucía, las producciones para tomate concentrado pasaron de 1.500.000 toneladas en 1999 a 2.600.000 toneladas en la campaña anterior.
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