Lubasa compra por más de 105 millones de euros las dos torres que albergaron los juzgados en Valencia
La empresa Obras y Negocios SL, del grupo Lubasa, dedicada a la inversión inmobiliaria, se quedó ayer con las dos torres que sirvieron hasta hace tres años de sede de los juzgados de Primera Instancia, Instrucción, Menores y Vigilancia Penitenciaria de Valencia en la calle de Navarro Reverter. 105.246.820 euros fue la puja de Lubasa que logró quedarse con un edificio que dispone de una superficie total de 17.892,50 metros cuadrados, de los cuales 3.140,22 metros cuadrados son bajo rasante y 14.752,28 metros cuadrados son sobre rasante.
La subasta pública celebrada ayer en la sala de subastas de la Ciudad de la Justicia de Valencia fue el final de un proceso que oficialmente se inició con el anuncio publicado en el DOGV (Diari Oficial de la Generalitat Valenciana) el pasado 14 de noviembre. En él se especificaba que para tomar parte en el proceso de subasta, los licitadores tenían que constituir ante el órgano de contratación una fianza por valor de 1.320.000 euros, presentar en tiempo y forma la documentación especificada en el pliego de condiciones e incluir en ella la oferta económica. El pasado día 19 la mesa de contratación dio el visto bueno a las distintas propuestas. La mesa de subasta de ayer estuvo presidida por el subsecretario de Economía José Miguel Escrig Navarro.
El precio de salida del edificio de Navarro Reverter, propiedad de la Generalitat desde 1995 por un decreto que regulaba los traspasos de funciones de la administración del Estado a la Comunidad Autónoma en materia de provisión de medios materiales y económicos, se fijó en 66 millones de euros.
La empresa adjudicataria, Obras y Negocios SL (con domicilio social en el Paseo de la Alameda de Valencia y cuyo administrador único es Luis Batalla Romero) mejoró el precio de salida en 39 millones de euros. Edificaciones Calpe SA (que ofertó 70 millones de euros por el inmueble), Layetana Newco Veintitrés SL (que ofreció 84 millones de euros) y Nou Litoral (que pujó con 81 millones de euros) fueron las otras empresas que concurrieron a la subasta pública.
Lubasa, a través de un portavoz, afirmó ayer que la compra del edificio está dentro de su política de inversiones sin que de momento se pueda precisar el uso final del inmueble.
