El tripartito alerta de la "preocupante deriva liberal" de Artur Mas

La liberalización de las políticas sociales y el aumento del peso del sector privado en la sanidad y la educación que propuso Artur Mas en su conferencia el pasado lunes le valieron ayer un alud de reproches por parte del Gobierno catalán y los partidos de izquierda. El tripartito en pleno y la consejera de Bienestar y Familia, Anna Simó, acusaron al líder de CiU de querer dejar "en manos del mercado" la atención a las personas.

Aunque el portavoz del Gobierno catalán, Joaquim Nadal, felicitó inicialmente a Mas por "subirse al carro de los que hablamos de políticas sociales", no tardó en asegurar que "de nuevo, CiU vuelve a equivocarse al querer aplicar un modelo que ya se demostró ineficaz".

El discurso de Artur Mas ante cerca de 3.000 simpatizantes, militantes, empresarios y periodistas no dejó indiferente a nadie por el empuje liberalizador que el líder nacionalista quiere dar a las políticas sociales de Cataluña en caso de recuperar el Gobierno de la Generalitat.

Entre las voces contrarias a la propuesta de Mas sobresalió la consejera de Bienestar y Familia, Anna Simó, que rechazó por completo la propuesta lanzada por el líder nacionalista en el sentido de dar un cheque a cada familia para que ésta gaste como estime oportuno la dotación económica que la Administración tiene prevista para la educación de sus hijos o la atención a sus mayores. "Esto significaría que la política social de este país quedaría en manos del mercado desregularizado".

Pese a declararse partidaria de continuar con el actual modelo educativo y de atención, en el cual el sector privado y las entidades no lucrativas tienen ya un papel importante, Simó considera que "la Administración debe estar en el centro de estas políticas para llevar las riendas del sistema". Sobre la posibilidad de basar en la iniciativa privada concertada el incremento del número de plazas residenciales y guarderías, Simó también fue clara: "nuestro Gobierno defiende y defenderá la creación de una red de responsabilidad pública sea cual sea el titular de la misma".

Desde el PSC, su portavoz, Miquel Iceta, alertó de las "derivas liberales preocupantes" que estaría defendiendo el líder de la oposición, una línea que contrapuso con la de los socialistas que, según Iceta, pasa por la "universalización" de los servicios públicos.

Desde las filas de Iniciativa per Catalunya, Joan Boada, aseguró que lo único que busca Mas con esta política es favorecer al sector privado y "volver llevar a Cataluña al clientelismo y a la corrupción".