Los promotores de la protesta pedirán a Zapatero que retire la ley

Cuando el presidente José Luis Rodríguez Zapatero anunció que recibiría a los convocantes de la manifestación contra la reforma educativa éstos contestaron que no irían "a hacerse la foto". Que se retire la Ley Orgánica de Educación (LOE), que dimita la ministra María Jesús San Segundo y que se alcance un pacto escolar. Ésas son las reclamaciones. Hoy se reúnen con el presidente en La Moncloa, pero no tienen muchas esperanzas de conseguir lo que piden, a juzgar, dicen, por las declaraciones de los dirigentes socialistas.

La patronal de centros concertados y privados CECE, una de las organizaciones convocantes, acusó ayer a Zapatero de "no atenerse a la realidad" cuando afirma que el proyecto de ley garantiza la libertad de los padres para elegir centro escolar y para matricular a sus hijos en Religión. La LOE "y él lo sabe, conculca la libertad de elección de centro y define la educación como servicio público por lo que relega la enseñanza privada a una segunda categoría. Tampoco garantiza el concierto de los centros privados cuando la demanda social los elige", responden en CECE. Las declaraciones del presidente del Gobierno no le parecen a esta patronal "la mejor manera de preparar el encuentro" que se celebrará hoy.

La Confederación católica de padres de alumnos (Concapa), insistió ayer en que la retirada inmediata de la ley es fundamental para avanzar en este asunto.

El sindicato USO, otro de los convocantes de la manifestación anunció que "acudirá a la cita con afán de dialogar, negociar y acordar. "Confiamos en que la reunión con el presidente de Gobierno sea el germen de un futuro pacto de estado por la Educación", algo que la federación, explican, lleva tiempo reclamando. Este sindicato pide que el gobierno paralice los trámites parlamentarios por los que atraviesa la ley actualmente.

El portavoz de la Coalición Democrática de Estudiantes (CODE), Álvaro Vermoet, también acudirá a la reunión con Zapatero. "Retaré al Presidente del Gobierno a que llegue a un pacto con el PP en materia de educación", ha dicho.

La Federación Española de Religiosos de la Enseñanza, que no convocó pero apoyó la manifestación, también irá a la reunión. En un comunicado manifiestan su interés por modificar la ley, aunque no piden su retirada, porque creen que supone peligro real para los centros concertados por la "asfixia económica" y porque la ley "prevé un sistema de elección de colegios intervencionista". Lamentan además que se reconozca la educación en el texto como un servicio público y no social y critican que no se exija a las familias que se adhieran al ideario católico del centro si quieren matricularse en él.

Varias de las organizaciones que convocaron la manifestación se han pronunciado a favor de que la asignatura de Religión tenga la categoría del resto y que su nota cuente en el expediente académico.