El Gobierno ofrece 7.600 millones a la minería del carbón para frenar la protesta

Los mineros del carbón volvieron a provocar ayer cortes de carreteras y vías férreas en las proximidades de las cuencas mineras de Asturias y León. Un grupo de seis de ellos se encerró en un pozo del Bierzo. Las medidas de presión se mantienen ante la reunión prevista para manaña entre el Ministerio de Industria y los sindicatos para alcanzar un acuerdo sobre el Plan de la Minería del Carbón 2006-2012. El Gobierno ofrece 7.605 millones de euros para el periodo: 2.880 millones para la reactivación de las zonas mineras y 4.725 millones en subsidios.

Seis mineros de León se encierran en un pozo y en Asturias siguen los cortes de carretera

El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, aseguró el pasado septiembre que propondría un plan para el sector minero aceptable para los sindicatos. "¿Alguien puede creer que un presidente de León no va a hacer un buen plan para las comarcas mineras?", se preguntó durante una fiesta minera en Rodiezmo (León) ante miles de asistentes. El acuerdo no es tan fácil. La huelga de dos días convocada por los sindicatos para el jueves y el viernes continuó ayer.

Los mineros de Asturias, donde se concentra la mitad del sector, protagonizaron disturbios, con cortes de calzadas y vías férreas con barricadas, informa Javier Cuartas. Se vieron afectadas la red de cercanías en Langreo, la autovía del Cantábrico, la carretera nacional 634 a la altura de Siero y la 632 en Castrillón. En esta localidad, una barrera de neumáticos ardiendo dificultaba el acceso al aeropuerto de Asturias. Antidisturbios de la Guardia Civil lograron restablecer el paso tras dos horas.

Los mineros de León, la otra gran región minera, cambiaron las movilizaciones en las carreteras por otras medidas, informa Marifé Moreno. Seis de ellos se encerraron a 300 metros de profundidad en el pozo Malabá, en Torre del Bierzo, y aseguraron que seguirán allí hasta que se resuelva el conflicto. Un centenar más acudió al cercano lavadero de carbón de Uminsa e intentaron paralizar la actividad.

Los sindicatos acordaron también extender la huelga desde ayer y hasta el próximo martes, cuando estaba previsto que se reanudaran los paros, confirmaron a Efe fuentes de CC OO. Por su parte, los representantes sindicales encerrados en el Ministerio de Industria desde el miércoles aseguraron que mantendrían su actitud al menos hasta manaña, cuando está prevista una reunión con el Gobierno.

La propuesta del ministerio para el nuevo Plan del Carbón 2006-2012 prevé una inversión total de 7.605 millones de euros, un 35% menos que los 11.694 millones de euros invertidos entre 1998 y 2005. Cuando se aprobó el anterior plan, en 1997, el sector contaba con más de 24.500 trabajadores. Hoy quedan 8.694, unos 16.000 menos. El anterior Gobierno del PP eliminó un 65,3% de los puestos, más del doble de lo que había pactado con los representantes mineros. Por eso, desde Industria aseguran que su propuesta es "mejor que el plan anterior".

Entre las ayudas previstas en el nuevo plan se incluyen 2.880 millones de euros para la reactivación de zonas mineras. Con este presupuesto, Industria calcula que la inversión por cada prejubilado ascenderá a 1,15 millones de euros. El anterior plan preveía una inversión de 445.000 euros por cada una de las 7.000 prejubilaciones acordadas. Al aumentar las prejubilaciones hasta 16.000, esa inversión se redujo hasta 195.000 euros.

La nueva propuesta se completa con ayudas a la producción por 3.827 millones de euros. Además, el ministerio pretende subvencionar el consumo de carbón con 898 millones de euros hasta 2012.

El sector del carbón en España depende de las subvenciones. Para 2006 está previsto que el gasto del Estado en la minería alcance 842 millones, 10 veces más que para fomentar las energías renovables y el triple que para fomentar el turismo. Desde el ministerio aseguran que con estas ayudas el carbón español "sale a precio de oro". El coste medio del carbón en España es de 110 euros por tonelada, casi el doble que el carbón extracomunitario.

Una de las diferencias entre el nuevo plan y el del PP reside en las recolocaciones. Industria propone contratar a 3 nuevos trabajadores por cada 7,5 prejubilados, lo que supondrá 1.600 nuevos empleos. En el anterior plan se pactó contratar a 3 trabajadores por cada 16 prejubilados, lo que representaban 4.000 nuevos empleos. Durante el Gobierno del PP sólo fueron contratados 3.000 nuevos mineros.

Desde Industria justifican que dar más dinero al sector supone restarlo de otros capítulos. Con el coste de las ayudas al carbón se podrían pagar más de 160.000 pensiones o financiar la educación infantil de 300.000 niños.

En cuanto a la producción, la actual propuesta estudia reducir ésta hasta 9,2 millones de toneladas de carbón en 2012, un 24% menos que en la actualidad. El convenio anterior redujo hasta 12,1 millones de toneladas de carbón las 18 que se producían en 1998, una disminución de 31,7%.