Dimite un edil del PSE tras aparecer pintadas amenazantes en su casa
El Consistorio de Elorrio condena las presiones al concejal, de 70 años
A sus 70 años, Adolfo García Herrero, uno de los dos ediles del PSE en la localidad vizcaína de Elorrio, ha dicho basta. No ha sido la edad ni el cansancio lo que han hecho mella en este concejal socialista. En la madrugada del lunes, desconocidos pintaron en la fachada de su domicilio lemas amenazantes como "fascista", "asesino" y "terrorista". El Ayuntamiento, en manos del PNV, condenó ayer los hechos y se solidarizó con el edil.
Mari Carmen Muñoz, cabeza de lista del PSE en Elorrio en los últimos comicios municipales, había disfrutado hasta ayer de la compañía en el Consistorio vizcaíno de un hombre "bueno y valiente", cuya única preocupación en su puesto ha sido la de "trabajar en beneficio del pueblo". Por primera vez, los socialistas habían logrado en esas elecciones incrementar su presencia en el Ayuntamiento hasta llegar a dos ediles.
Pero estos dos años y medio han sido especialmente duros para Adolfo García, un hombre que no se ha achantado ante las amenazas y constantes insultos que procedían del mundo que vitorea y ensalza la violencia de ETA. Un hombre muy conocido en el pueblo, donde también preside el Club Deportivo y la agrupación socialista. "Él toreaba bien la presión exterior, iba a cara descubierta y cuando le insultaban por la calle se volvía y les increpaba; no se arredra", recordaba su compañera de partido Mari Carmen. Adolfo no llevaba escolta, pese a saberse en la diana por su militancia socialista. Pero lo del lunes pasado fue la gota que colmó el vaso, sobre todo en su entorno familiar más cercano, su esposa. Ayer, las pintadas para denunciar la muerte del etarra José Ángel Alzuguren, Kotto, que fue hallado ahorcado en su celda el pasado lunes en la prisión de Soria, seguían presentes de manera ostensible en las calles de Elorrio. El grupo encargado esa noche de llenar el pueblo de pintadas con insultos contra el PSOE hizo una parada especial. Llegó al domicilio de Adolfo García sobre la una y media de la madrugada, pintó con insultos la fachada y, antes de marcharse, uno de sus integrantes llamó al timbre de la puerta.
"Asesino y fascista"
Adolfo sólo acertó a ver a varias personas huyendo a la carrera. No hubo ningún incidente más. Hasta el día siguiente no se dio cuenta del objetivo de aquella visita a deshoras arropada por la oscuridad. La palabra "asesino", pegada a la de "terrorista" y a la de "fascista". Para acabar, otra frase responsabilizándole de "todas las muertes".
Mari Carmen Muñoz agradeció ayer expresamente al alcalde de Elorrio, el nacionalista Agustín Asua, no sólo el apoyo dado a su compañero y a su familia en el Consistorio estos días. También que la brigada de limpieza del Ayuntamiento hubiera limpiado la fachada del domicilio de Adolfo, que a primera hora de ayer registró su dimisión. Minutos antes de que se celebrara la Junta de Portavoces, la imagen de Mari Carmen, sola, sentada en torno a la mesa de reuniones, evidenciaba su situación de desconsuelo. Pronto se disipó esa soledad, gracias a la unanimidad con la que la corporación aprobó una declaración de condena por los hechos. PNV, PP, EB y PSE subrayaron que "quienes defienden sus ideas con amenazas las deslegitiman". El PSE, que atribuyó a Batasuna las amenazas, "comprendió" la decisión de Adolfo García y agradeció su trabajo. Pese a todo, seguirá al frente de la agrupación socialista.
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