La Junta descarta daños medioambientales por el vertido de crudo de Huelva

La limpieza de las playas de Huelva afectadas por el vertido de crudo que empezó el miércoles pasado ha permitido recoger hasta el momento 250 barriles de 200 litros de petróleo cada uno, según datos del delegado del Gobierno en Huelva, Manuel Bago. Los contenedores se han llevado a las instalaciones de Cepsa, donde permanecerán hasta que la Consejería de Medio Ambiente determine el lugar adecuado para guardarlo. Bago afirmó que el vertido está "prácticamente" solucionado. "Casi no queda nada en la costa y no aparecen manchas de crudo en el mar".

Bago descartó que se vayan a producir consecuencias negativas en el medio ambiente o la pesca. "No habrá consecuencias medioambientales y, si aparecieran, estoy seguro de que la Junta tomará las medidas oportunas. No existe nada que nos haga pensar que vaya a afectar al medio ambiente o a la pesca".

En las tareas de limpieza han intervenido unas 200 personas provenientes de Cepsa y de empresas públicas de la Junta y del Gobierno central, así como de la Dirección General de Costas, Capitanía Marítima y la Autoridad Portuaria, informó el subdelegado. Bago criticó al PP "por calificar de Prestige este derrame", ya que "eso puede causar un gran daño económico a la provincia de Huelva, por la repercusión que tendría en muchos mercados". Por ello, solicitó que no se politice el tema y consideró "precipitado e irresponsable" a los populares.

El subdelegado también anunció que hoy se reunirá el órgano rector que ha coordinado desde el principio el caso para "dar por solucionado el derrame, aunque dejaremos un retén de alerta, para atender a las necesidades que pudieran surgir". En cuanto a la investigación, indicó que "estamos dejando a los técnicos hacer su trabajo detenidamente y, cuando concluyan, tomaremos las decisiones que correspondan". De otro lado, los alcaldes del PP de los municipios onubenses de Lepe y Punta Umbría, Manuel Andrés González y José Carlos Hernández Cansino, respectivamente, reiteraron ayer sus críticas a la Junta y al Gobierno por la "falta de información" que reciben sobre el vertido. Los dos primeros ediles denunciaron que llevaban "48 horas sin saber nada del vertido" y sin que "se hayan puesto en contacto con nosotros para explicarnos la situación".