Jodorkovski llama desde Siberia a un cambio de régimen en Moscú

Desde la remota prisión siberiana donde se halla, a más de 7.000 kilómetros de Moscú, el magnate Mijaíl Jodorkovski ha acusado al Kremlin de quererlo "destruir físicamente". En su primer mensaje desde el penal de la provincia de Chitá (en la frontera con China), al que fue trasladado el pasado día 16, Jodorkovski ha hecho un llamamiento a sus conciudadanos para que formulen un programa de desarrollo de Rusia en el siglo XXI y busquen la nueva élite política que pueda encabezarlo.

"El Kremlin intenta aislarme totalmente del pueblo y de la gente; es más, destruirme físicamente", señala el hombre que llegó a tener la fortuna mayor de Rusia y que hoy cumple una condena de ocho años en Krasnokamensk, una localidad que se desarrolló en función de unos importantes yacimientos de uranio. La dureza de la condena en un entorno claramente perjudicial y el alejamiento del reo de su lugar de residencia han provocado una reacción de censura por parte de los grupos de activistas a favor de los derechos humanos, que han exigido la intervención de Vladímir Lukin, el ombudsman de Rusia.

Platón Lébedev, otro ejecutivo de la petrolera Yukos que era juzgado junto a Jodorkovski, ha sido enviado a una prisión del círculo polar ártico. Ambos ejecutivos han sido condenados a ocho años. Jodorkovski fue encarcelado hace dos años y, por tanto, ha cumplido ya parte de la pena. No está claro si el magnate, que recibe estos días la visita de su esposa, Ina, podrá acogerse a redención de pena por el trabajo, dado que las actividades laborales en la prisión resultan un privilegio.

En su mensaje, Jodorkovski ha acusado al Kremlin de no estar dispuesto a mantener una discusión abierta con él y de intentar convencer a los rusos de que "la lucha se ha acabado". "Nuestro país tiene ante sí una enorme tarea; es necesario formular un programa de desarrollo de Rusia en el siglo XXI". Entre los fines que Jodorkovski formula figuran la construcción de un nuevo ejército y nuevos órganos del orden público, la creación de un nuevo funcionariado "interesado en el destino del país y la sociedad", y no en "el enriquecimiento personal incontenido". El magnate advierte del peligro de que el Oriente Lejano y Siberia puedan acabar bajo el control de China dentro de pocos años y afirma que es necesario recuperar la posición y prestigio que Rusia ha perdido en el mundo como resultado de "la falta de profesionalismo y en ocasiones de la traición". "El que no teme hoy apoyar a los presos políticos y decir no a la máquina represiva de la burocracia criminal tiene derecho a denominarse persona con letras mayúsculas", afirma.

Una encuesta realizada por el centro de Yuri Levada ha mostrado que el 18,5% de los rusos considera posible que las autoridades intenten eliminar a Jodorkovski físicamente. El 53% de los encuestados está seguro de que su proceso fue iniciado por miembros de la dirección rusa, incluido el presidente, Vladímir Putin. El 59% cree que las convicciones políticas de Jodorkovski y su apoyo financiero a los políticos de oposición han desempeñado un importante papel en su persecución.