Maragall da marcha atrás y renuncia a cambiar su Gobierno
El presidente cede ante el tripartito y se limita a crear cuatro grandes áreas
El presidente de la Generalitat, Pasqual Maragall, confirmó ayer "indefinidamente" a todos sus consejeros al frente de los departamentos que actualmente ocupan. Con ello dio marcha atrás y renunció a la reestructuración que ambicionaba, condicionado por la presión de los tres partidos que sustentan su Ejecutivo: PSC, ERC e ICV-EUiA.
La apuesta de cambio de Maragall que rechazó el tripartito se limita ahora a la creación de cuatro grandes áreas que tendrán un funcionamiento similar a las comisiones delegadas del Gobierno central. El control del área política recaerá en Joan Saura (ICV-EUiA); la económica, en Antoni Castells (PSC); la territorial, en Joaquín Nadal, mientras que la socialista Marina Geli y la republicana Marta Cid copresidirán la macroárea social.
Con estos retoques, que pretenden mejorar la coordinación del Ejecutivo catalán, concluyen 10 días de incertidumbre sobre la continuidad del Ejecutivo catalán. Maragall intentó hasta la noche del lunes introducir cambios en su Gabinete, pero el tripartito se lo impidió.
La resolución de la crisis política fue anunciada por Maragall en un acto público. El presidente comunicó los cambios en la entrega de la medalla de oro de la Generalitat al presidente de La Caixa, Ricard Fornesa, en presencia de su Gobierno y del director del Fondo Monetario Internacional, Rodrigo Rato.
