El borrador del PA dota a la comarca de poder político y debilita la provincia

El borrador del Estatuto que ha elaborado el PA define a la comarca como la principal unidad de la organización territorial de Andalucía, con poder político propio, en claro detrimento del papel de las diputaciones. Según el secretario general andalucista, Julián Álvarez, lo que se pretende conseguir es la cohesión de renta y desarrollo y evitar "las grandes diferencias entre el litoral mediterráneo y las zonas del interior".

El capítulo de la organización territorial del borrador de Estatuto del PA es uno de los más novedosos. La figura estelar es la comarca como principal unidad supramunicipal, en claro detrimento del papel de las diputaciones provinciales, que los andalucistas hacen desaparecer de un plumazo del Estatuto. El secretario general del PA, Julián Álvarez, sostiene que la diputación provincial no está consagrada por la Constitución, "salvo para decir que a través de ella se desarrollaría el proceso de la formación de las autonomías y, por lo tanto, es posible suprimirla sin más".

No ocurre lo mismo con la provincia, que está expresamente prevista por la Constitución, por lo que el borrador andalucista opta por reducir sus competencias a materias de coordinación y a la resolución de conflictos de competencias entre comarcas. Su gobierno, según el texto del PA, queda en manos de lo que se denomina "Consejo Provincial", integrado por los presidentes de las comarcas cuya capitalidad se encuentre en la provincia.

El borrador andalucista configura a la comarca como la demarcación de prestación de servicios de la Junta de Andalucía, y establece que buena parte de la gestión ordinaria de los servicios periféricos de la Junta pueda desarrollarla la propia comarca. También garantiza al ente comarcal derecho a intervenir en la gestión de aquellos servicios que no le sean delegados por parte de la administración autonómica, especialmente en materia sanitaria (hospitales comarcales, centros de salud, etcétera) y en materia educativa (centros de primaria y secundaria, guarderías, entre otros).

El PA propone crear un nuevo órgano: el Consejo Comarcal de Andalucía, integrado por todos los presidentes comarcales, y que tendrá por competencias velar por la autonomía local, informar los proyectos de ley que afecten a los municipios y a las comarcas, y designar dos miembros para el Consejo Consultivo de Andalucía.

A juicio de Julián Álvarez, el establecimiento de un mapa comarcal de Andalucía y la dotación de poder político propio a estos órganos comarcales "va a sacar del olvido y la marginación a amplias zonas del territorio de Andalucía, que nunca aparecen en los planes provinciales o en las inversiones de la Junta, además de cumplir las previsiones del Estatuto de 1980 que, en esta materia, nunca fueron respetadas por el PSOE".

El dirigente andalucista subraya que uno de los problemas actuales de los ayuntamientos es su escasa capacidad de influencia, porque la federación de municipios y provincias, aunque engloba a todos, carece de poder político. "Que las comarcas tengan órganos con competencias es un gran avance", señala. Pese a lo mucho que se ha discutido sobre la dificultad de diseñar un mapa comarcal de Andalucía y el problema de hacer conciliar intereses dispares, Julián Álvarez cree que buena parte del trabajo está ya hecho. "La Unión Europea nos ha obligado a adoptar estructura comarcales para ampliar los programas Leader y Proder y hay infinidad de asociaciones voluntarias entre municipios para servicios de agua, cementerios, residuos y demás. La realidad va por delante".

En cuanto al municipio, el borrador de Estatuto del PA lo define como el ente local básico, con el refuerzo de su autonomía respecto a otras instancias. A tal efecto se introduce un artículo nuevo que dice: "Ninguna otra administración podrá controlar por razones de oportunidad los actos y acuerdos adoptados por los municipios". También se dota de rango estatutario la Carta Europea de Autonomía Local, cuyos contenidos, dice el borrador, "informarán al régimen local andaluz".

Álvarez sostiene que la reorganización territorial de Andalucía que propone su partido no es una mera reforma, sino un instrumento para combatir la falta de cohesión. "Después de 25 años de ejercicio autonómico, las diferencias en renta y desarrollo entre las zonas del interior y el litoral mediterráneo, lejos de corregirse, se han ido agravando", afirma el andalucista. A su juicio, el refuerzo de la autonomía de los municipios y la oficialización de las comarcas, dotándolas de poder político, serán los ejes de la futura cohesión.

El PA celebrará una convención nacional el próximo día 29 en Sevilla para aprobar el borrador de la reforma del Estatuto.