Trabajo propone un despido más barato en contratos a parados

El Gobierno lanzó ayer su propuesta para reformar el mercado laboral, que amplía los colectivos con posibilidad de suscribir un contrato fijo con despido más barato. Además de jóvenes, mujeres y mayores de 45 años, cualquier persona que lleve un mes en paro podrá acogerse a esa fórmula. Para contrarrestar, se dificulta el encadenamiento de contratos temporales y su uso por las subcontratas. CEOE considera casi imposible un acuerdo.

Siete meses después de comenzar la negociación para reformar el mercado de trabajo, el Gobierno presentó ayer a Comisiones Obreras, UGT y CEOE un documento con sus propuestas, como le habían pedido los sindicatos. El texto trata de combinar reivindicaciones de la patronal y de los sindicatos, aunque ambas partes lo consideran desequilibrado y favorable a las tesis del contrario. Pese a todo, el secretario general de Empleo, Valeriano Gómez, se muestra optimista sobre la posibilidad de llegar a un acuerdo antes de final de año.

La exigencia de la patronal de que se presente una nueva propuesta para seguir negociando ensombrece esas perspectivas. "El diálogo social entra en serias dificultades para un acuerdo", advirtió el secretario general de la CEOE, Juan Jiménez Aguilar. El presidente, José María Cuevas, informará hoy sobre si su organización abandona o no la mesa de diálogo tras la reunión que celebrará la directiva. Frente a ese rechazo rotundo, los sindicatos, pese a discrepar en muchos aspectos, consideran el documento válido para negociar.

El texto del Gobierno ha suavizado una de las medidas que generaban más rechazo sindical: la extensión a todos los nuevos contratos del despido con indemnización de 33 días por año trabajado (frente a los 45 ordinarios). Diferentes miembros del Ejecutivo, entre ellos el vicepresidente y ministro de Economía, Pedro Solbes, se habían mostrado partidarios de aplicar esa fórmula a los nuevos para fomentar la contratación fija.

Finalmente, Trabajo ha ampliado el colectivo amparado por ese modelo. Además de jóvenes hasta 29 años, mujeres en sectores en los que estén subrepresentadas y mayores de 45 años, los parados sólo necesitarán llevar un mes en el registro para poder acogerse a esta fórmula (hasta ahora eran seis meses). Además, los contratos temporales que se conviertan en indefinidos podrán elegir ese contrato (en la actualidad sólo se aplica a los suscritos hasta diciembre de 2003).

No es la única medida que reduce los costes empresariales en caso de despido. El Fondo de Garantía Salarial, que protege a los trabajadores cuyas empresas no pueden afrontar sus pagos, costeará el 40% del despido de las sociedades con menos de 50 trabajadores. En la actualidad, el tope está en 25 trabajadores. Esta medida afecta sólo a los despidos originados por dificultades económicas de las compañías.

Un capítulo más del agrado de los sindicatos es el de medidas contra la temporalidad. El Gobierno pretende que cualquier trabajador que durante tres años haya suscrito contratos temporales de más de dos años en una misma empresa pase automáticamente a ser fijo. En la actualidad el trabajador tiene que recurrir a los tribunales para demostrar su vinculación con la empresa, mientras que de este modo sería automático. También se propone una nueva redacción del contrato por obra (vinculado a una determinada actividad, aunque muy utilizado para labores continuas), de forma que se desvincule de las contratas y subcontratas, que recurren con frecuencia a él. Valeriano Gómez explicó las dos posibles contrapartidas de esta novedad: o se crea un contrato indefinido con posibilidad de rescisión cuando la contrata pierda su actividad o se abre la posibilidad a un despido más barato (de 20 días por año) en ese supuesto.

Más bonificaciones

Para incentivar la contratación indefinida se aumenta de dos a cuatro años el periodo máximo en que una empresa puede recibir bonificaciones. En esos menores pagos a la Seguridad Social se incluirá también al colectivo de hombres de 16 a 30 años, uno de los pocos hasta ahora excluidos de esos incentivos.

El Gobierno también entiende que es necesario rebajar lo que los empresarios pagan a la Seguridad Social por desempleo hasta medio punto en 2008 (ahora abonan el 6% de la base de cotización del trabajador). Atrás queda la pretensión inicial de penalizar las cotizaciones de los contratos temporales para frenar su uso. Por el contrario, Trabajo sugiere eliminar el sobrecoste que soportan las empresas de trabajo temporal en cotizaciones e indemnizaciones al trabajador.

En protección por desempleo, los parados mayores de 45 años sin cargas familiares podrán cobrar el subsidio (unos 300 euros al mes) durante seis meses. Hasta ahora sólo correspondía a quienes soportaban cargas familiares.

Con esta propuesta sobre la mesa, la CEOE considera que el mercado se convierte en "más intervencionista, rígido y caro". Toni Ferrer, de UGT, lamenta las "mayores facilidades para destruir empleo", pero cree que hay que seguir negociando. Para Lola Liceras, de CC OO, "más allá del contenido es bueno tener la posición del Gobierno encima de la mesa".