Rajoy descarta un pacto en el Congreso porque la reforma "no puede maquillarse ni con 50 enmiendas"

El líder del PP, Mariano Rajoy, declinó ayer el ofrecimiento del Gobierno para pactar las enmiendas al Estatuto catalán. "No voy a engañar a nadie, ese texto no admite cuatro ó 50 correcciones, ésa no es la solución. No es un documento que se pueda maquillar, juega con demasiadas cosas. Por eso, vamos a votar que no en la toma en consideración del texto". La vicepresidenta primera, María Teresa Fernández de la Vega, había señalado el viernes que se "dirigiría personalmente" a Rajoy para ofrecerle pactar las enmiendas en el Congreso.

Aunque el líder del PP suavizó ese mismo día el tono de sus críticas, ayer, de nuevo, volvió a la carga. En la clausura de un acto sobre educación organizado por el PP, Rajoy señaló: "Es un texto malo para España y malo para Cataluña. Propone un modelo confederal en el que unos pueden opinar del todo y otros no pueden opinar de la parte. Un presidente del Gobierno de España no puede aceptar esto nunca. Sólo se le pide un poco de patriotismo y de responsabilidad". Y añadió: "Si Rodríguez Zapatero tuviera agallas, reconocería públicamente que se ha equivocado y reclamaría a sus socios políticos que no sigan adelante".

Rajoy reiteró que pedirá que el texto del Estatuto se tramite como una reforma constitucional y advirtió de que si no lo hacen, pedirá que se convoquen elecciones generales. "Se trata simplemente de que se cumpla la ley, la Constitución, las reglas de juego. La Constitución española exige cuando se pretende hacer un cambio como el que aquí se plantea que opinen los españoles", explicó el líder popular. Fernández de la Vega replicó a Rajoy desde Lisboa. Pidió al PP que imite "al resto de las fuerzas políticas" y "abandone su permanente actitud de confrontación en relación con los temas territoriales y el Estatuto", una actitud, subrayó, "que sólo trata de enfrentar a Cataluña con el resto de España", informa Miguel Mora.

En Madrid, el secretario de Organización del PSOE, José Blanco, acusó a Rajoy y a José María Aznar de "recorrer España alimentando la confrontación y el miedo usando la mentira".