Industria publicará precios y márgenes del comercio de alimentos

La productividad de la economía española aumenta a tasas irrisorias. Pero en el caso del comercio, decrece desde hace tres años. Industria presentará a lo largo de noviembre el plan de competitividad del comercio para remediar la situación. El Ejecutivo no detecta problemas de competencia, pero introducirá más transparencia -con la publicación de precios y márgenes en productos de alimentación- y alentará la creación de canales alternativos.

El plan aboga por "mejorar el sistema de autorización administrativa para la apertura de establecimientos comerciales de acuerdo con la futura directiva europea de servicios", lo que en la práctica se traducirá en revisar las trabas autonómicas a a la apertura de hipers.

El vicepresidente económico del Gobierno, Pedro Solbes, presentó en febrero un paquete de medidas urgentes para aumentar la competitividad de la economía española. En lo relativo al comercio, el plan establecía un mandato dirigido a Industria, Comercio y Turismo para elaborar un plan de comercio interior. El ministerio que dirige José Montilla tiene ya sobre la mesa ese plan, tras negociar las grandes líneas con patronales y sindicatos.

El proyecto tiene dos grandes líneas de actuación. Por una parte, introduce medidas de transparencia en los mercados, con información semestral sobre los niveles de precios por formatos (hipers, supermercados, mercados y tiendas) y la elaboración de un índice de márgenes para 32 productos de alimentación fresca, con el precio en origen, del mayorista y en destino. Por otro, estimula la creación de canales alternativos y la mayor participación de los agricultores en todo el proceso, con la inclusión de las cooperativas agrarias en la red de mercados centrales.

El plan, que aún carece de asignación presupuestaria, "no busca el adelgazamiento de un sector muy dinámico en términos de empleo o superficie de venta, sino conseguir mayor eficiencia ante el deterioro de la productividad en los últimos años", explicaron fuentes de Industria.

Malas cifras

Si la evolución de la productividad es preocupante para el conjunto de la economía española -con un alza del 0,4% en 2004-, las cifras que presenta el sector comercial son especialmente malas, con caídas en 2002 (1,3%), 2003 (1,8%) y 2004 (1,5%). Las causas de esta evolución son el crecimiento continuo de la superficie de venta y el aumento del empleo en una actividad que no es de alto valor añadido. "Los metros cuadrados de apertura de los últimos años superan la media europea. De seguir con esta evolución de la productividad, el sector podría verse abocado a un ajuste", advirtieron las mismas fuentes.

Industria rechaza que los problemas de productividad se deriven de las normativas autonómicas que limitan la apertura de hipers. Pero el plan adelanta uno de los cambios a los que deberá someterse la regulación como consecuencia de la normativa europea. Entre las medidas destacadas, incluye "mejorar el sistema de autorización administrativa para la apertura de establecimientos comerciales, de acuerdo con la futura directiva europea de servicios". Con ello, se podrían eliminar parte de las trabas que imponen las comunidades a la apertura de grandes superficies cuando superan, por ejemplo, una determinada cuota de mercado.

Un total de cinco comunidades aplican actualmente moratorias a la apertura de centros comerciales. Pero más que en las moratorias, la directiva podría generar problemas en los planes de equipamientos comerciales que están aprobando las autonomías. "Algunas comunidades ya elaboran sus planes pensando en las restricciones que impondrá Bruselas. Una vez se apruebe la directiva, el Gobierno aprobará una ley para trasponer la legislación comunitaria y después las comunidades deberán adaptar esos planes", según fuentes de Comercio.

Industria se ha reunido con el sector para negociar el plan. Ignacio García, director general de Asedas -la patronal de los supermercados-, ve "positivas" las propuestas del Ejecutivo, "siempre que sean el eje de una futura política comercial que solucione los actuales problemas". Asedas ha propuesto "una batería de medidas laborales, fiscales y para reducir los costes regulatorios", y destaca que el sector "no tiene en absoluto un problema de competencia, algo que sí ocurre en otros países europeos". Para la patronal de las grandes superficies, Anged, el plan "va en la línea" de sus peticiones tradicionales: "Mayor flexibilidad, un marco legal menos intervencionista y menores costes de funcionamiento para las empresas", según un portavoz.

Datos de Eurostat

Según los datos de Eurostat, los precios de alimentación, bebidas y tabaco en España son los menores de los Quince (ver cuadro). Incluso en algunas de las nuevas incorporaciones, los ciudadanos soportan precios superiores, como en el caso de la República Checa. A pesar del elevado grado de competencia -por el gran número de operadores en todos los formatos-, en España los expertos señalan que este tipo de indicadores que ultima el Ejecutivo son útiles en situaciones de alteraciones de mercado, para ver qué márgenes aplica cada eslabón de la cadena.

Meses antes de las últimas elecciones generales, algunos alimentos frescos dispararon sus precios, con un efecto inmediato sobre la inflación. El tomate se erigió como gran protagonista y desató una polémica que aún colea.