La banda neonazi de Valencia tenía lanzagranadas y munición de mortero
El grupo neonazi desarticulado en Valencia disponía de un pequeño arsenal. La Guardia Civil mostró ayer un lanzagranadas, varios rifles y pistolas semiautomáticas, munición de mortero, ballestas, navajas y puñales, algunos de ellos grabados con el emblema de las SS. Con la detención, anteanoche, de otros dos miembros de la banda, el número de arrestados se eleva a 22. El grupo estaba muy jerarquizado y funcionaba con una disciplina "casi militar". A los ultras se les atribuye, entre otras actividades delictivas, la organización de "cacerías" de inmigrantes.
El Frente Antisistema tenía un líder y mandos intermedios. La Guardia Civil declinó ayer informar sobre la identidad, la edad, las profesiones y las conexiones de sus miembros con otras organizaciones de extrema derecha por respeto al secreto de sumario y porque la operación sigue abierta. Se sabe, sin embargo, que la mayoría tiene entre 20 y 30 años y que tres son militares profesionales.
La financiación del grupo provenía de la venta a través de Internet de artículos relacionados con el nazismo y con la venta personal o por correo de armas blancas y de armas de fuego.
Los ultras tenían clientes en distintos puntos de España y fabricaban algunos de sus artículos. La Guardia Civil exhibió ayer moldes para la fabricación de esvásticas y de puños americanos, hechos en metacrilato para eludir los detectores de metales.
Nueve de los detenidos ingresaron en prisión el sábado por orden de la magistrada del Juzgado de Primera Instancia de Carlet, coordinadora de las investigaciones. Tres de ellos han quedado en libertad después de depositar la fianza. Los dos últimos detenidos también han quedado en libertad, con cargos, y declararán ante la juez en los próximos días.
Fabricación de explosivos
La Guardia Civil ha registrado una empresa y dos plantas bajas, además de las viviendas de los detenidos. Entre los objetos de los que se ha incautado hay un manual para la fabricación de explosivos, numerosa literatura nazi, camisetas antisemitas, anabolizantes y un vídeo, en el que puede leerse Croatas en Valencia.
El bajo en el que supuestamente se realizaba la venta de armas se encuentra en el número 69 de la avenida de las Tres Cruces, una zona del extrarradio de Valencia cercana a un polígono industrial. El seguro de la persiana metálica y parte del pavimento adyacente mostraban ayer las huellas del registro. En la persiana hay pintada con spray una cruz céltica y la frase Siempre fieles.
Los vecinos dicen que el local era frecuentado por el grupo los fines de semana y que todos en la zona sabían que allí se reunían neonazis. Unos tipos con la cabeza rapada, tatuados, vestidos con botas militares y ropa oscura, con el aspecto de haber pasado mucho tiempo en el gimnasio. La clase de gente con la que uno no se acerca a hablar, comentaba un vecino, que a veces celebraban fiestas. La Operación Pánzer continúa abierta, lo que significa que podrían producirse nuevas detenciones.
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