Burriel afirma que si el PSPV gobernara la Generalitat pararía el macroproyecto en torno a Mundo Ilusión

El responsable de Territorio y Vivienda en la dirección nacional del PSPV-PSOE, Eugenio Burriel, aseguró ayer que el partido pedirá explicaciones a los concejales socialistas de Cabanes y Oropesa que apoyaron la adjudicación a Marina d'Or de 20 millones de metros cuadrados junto al parque temático Mundo Ilusión, pero se pronunció en contra del proyecto por insostenible. Burriel aseguró: "Si nosotros gobernásemos la Generalitat pararíamos el proyecto".

El secretario de Territorio y Vivienda achacó que proliferen este tipo de proyectos al modelo económico y social que ha impulsado el PP desde que gobierna la Generalitat. "El propio Blasco apoya a través del Instituto Valenciano de la Vivienda proyectos basados en este modelo", objetó el dirigente socialista.

Burriel reconoció que los concejales de su partido han actuado en clave local y no en un marco más global, pero acto seguido subrayó que lo más grave en este contexto es que exista un gobierno autonómico, el del PP, que permita proyectos como el aprobado el sábado en Cabanes y Oropesa. "Tenemos un Consell que no sólo no pone control a este modelo sino que lo practica", apostilló Burriel. "Con esta adjudicación los ayuntamientos han perdido la decisión sobre todo ese territorio durante años", sentenció.

El proyecto adjudicado el sábado al grupo Marina d'Or supondrá una inversión de 6.000 millones de euros y afectará a una superficie de 20 millones de metros cuadrados, en los que está prevista la construcción de varios complejos de lujo y miles de viviendas en torno al parque temático impulsado por el presidente de la Diputación de Castellón, Carlos Fabra.

En contra del PP y del PSPV, que con su apoyo han permitido que el macroproyecto salga adelante, se han situado EU y el Bloc, que votaron hace dos días en contra de la adjudicación. Curiosamente estos dos partidos están enfrentados en Albalat dels Tarongers por otro PAI, con 4.500 viviendas y un campo de golf.La urbanización de cerca de 20 millones de metros cuadrados entre los términos de Cabanes y Oropesa se justificó con la construcción de un parque temático, Mundo Ilusión. La macrourbanización ya está aprobada, de forma provisional. Sin embargo, el parque, seis años después de que se planteara la apuesta, se encuentra todavía en período de gestación. La Diputación de Castellón, Carlos Fabra, presentó la idea. Después, la institución provincial se gastó 600.000 euros en estudios de viabilidad e informes técnicos que, un lustro después, de poco o nada valen.

Esta semana, cuando los plenos de ambos ayuntamientos ya han aprobado la urbanización de su entorno, la sociedad pública Mundo Ilusión recibirá, según anunció Fabra, otro estudio, el encargado a la consultora Dheadded Value, que definirá el diseño del proyecto de ocio.

La previsión es ésa, tal como dijo Fabra, aunque también el vicepresidente del Consell, Víctor Campos, dijo en enero que esa misma información llegaría a la sociedad pública "en pocas semanas". La Generalitat Valenciana asumió la responsabilidad y la titularidad del parque después de que el presidente de la Diputación lanzara la idea, pero parece no tener mucha prisa en acelerar el proyecto de ocio tras la experiencia deficitaria de Terra Mítica. Y más cuando la adjudicación de la urbanización del entorno al grupo Marina d?Or habrá de competir con otros dos parques de ocio que se incluyen en la propuesta urbanística elegida y que se ha desechado la opción incluida por la rechazada, la presentada por Lubasa, PGP y Ortiz, que contemplaba la "cesión" de 22,4 millones de euros a los ayuntamientos para la construcción del parque.

Fuente de polémica

El modelo de desarrollo territorial y urbanístico abre cada día nuevas vías de agua en la práctica totalidad de los partidos políticos. El apoyo inicial de populares y socialistas al proyecto de Rabassa en Alicante desató una profunda polémica en el seno del principal partido de la oposición, cuya dirección nacional ha apostado por un crecimiento y un desarrollo sostenible e incluso lanzado un decálogo de buenas prácticas urbanísticas en un periodo en el que el Consell, en manos del PP, ha convertido la construcción en el motor de desarrollo valenciano.

En Elda, el alcalde socialista Juan Pascual Azorín ha convocado un pleno extraordinario para hoy lunes para someter a aprobación provisional el Plan de Actuación Urbanística (PAI) de La Cañada, que supondrá la recalificación de 4,6 millones de metros cuadrados de suelo no urbanizable, donde se ha programado la construcción de un campo de golf y 7.500 viviendas. El PSPV de Elda ha tramitado este proyecto al margen de su plan general, a pesar de que la arquitecto municipal, que dimitió el lunes pasado, solicitó que el PAI no se abordara hasta que se aprobara la revisión del planeamiento, en fase muy avanzada.