El 12% de aumento del precio del comedor escolar indigna a los padres

Dejar a los hijos a comer en la escuela, pública o concertada, cuesta este año a los padres hasta el 12% más que el curso anterior. Un incremento similar o superior se prevé para los próximos dos años, debido a que al precio de este servicio se sumará el coste de las mejoras salariales, acordadas antes del verano, de los monitores y profesionales que trabajan en los comedores escolares. En tres años, pues, el precio del comedor se disparará, según denuncia la Federación de Asociaciones de Padres de Alumnos de Cataluña (FAPAC), que reclama a la Generalitat que asuma parte de este incremento.

El Departamento de Educación ha decretado para este curso un precio máximo de 5,20 euros por menú, el 12% más que el del año anterior, cuando era de 4,65 euros. Nuevos incrementos, de hasta el 15%, se prevén para los próximos dos años, de manera que el precio del comedor pondrá en un aprieto a muchas familias con escasos recursos, sobre todo si tienen más de un hijo escolarizado, según advierte la Federación de Asociaciones de Padres de Cataluña.

Joan Josep Rosell, presidente de la FAPAC, consideró ayer positivo que se mejoren las condiciones salariales y laborales de monitores y del resto de personal que trabaja en los comedores escolares, ya que la "profesionalización" de este colectivo "redundará en un incremento de la calidad del servicio". Sin embargo, las asociaciones de padres se oponen rotundamente a que el coste de esta profesionalización, que se suma al precio del menú, recaiga exclusivamente en las economías familiares. La FAPAC cree "abusivo" el aumento que sufrirá el precio del menú escolar "en poco tiempo" y quiere que este incremento "se reparta entre Generalitat, municipios y familias".

El convenio -firmado antes del verano- que mejorará las condiciones de monitores y personal del ocio educativo representará también un incremento del precio de las actividades extraescolares y de aquellas para las que se contrata a estos profesionales: servicio de atención matinal, casals de verano y excursiones.

Cerca de 400.000 alumnos de Primaria y Secundaria, según las asociaciones de padres, se quedan a comer en la escuela. Los comedores son gestionados por los consejos comarcales, aunque en Barcelona se encargan de ello los Servicios Territoriales de Educación.

El precio del comedor corre a cargo de los padres, pero Educación lo paga a los alumnos que deben escolarizarse en otro municipio por falta de oferta educativa en el suyo (25.700 niños de la escuela pública y 4.000 de la concertada). Además, Educación concede becas para el comedor a familias con escasos recursos (este año se beneficiarán de ellas unos 34.000 alumnos). Según el subdirector general de Escolarización, Carles Martínez, el objetivo de Educación es reducir las ayudas que el departamento no tiene obligación de aportar (como las destinadas al transporte escolar para alumnos que se escolarizan en su municipio) y destinar el dinero a incrementar las becas a familias con escasos recursos. El Consell Executiu aprobó ayer una partida de casi 87 millones de euros para los servicios de comedor y transporte escolar, el 6% más que el curso anterior.