Financiación sanitaria
Estos días tenemos un gran debate público sobre cómo encarar la financiación. ¿Queremos los españoles, seguir con este de modelo sanitario? ¿Queremos sanidad de calidad y universalizada? Supongo que la respuesta en una gran mayoría de los españoles será afirmativa, por tanto no puede ser de forma gratuita.
El Gobierno, hace sus deberes y en mi opinión, bien hechos; propone que a través de los llamados impuestos indirectos, se penalice económicamente al tabaco, al alcohol y las gasolinas.
Reunido El Consejo de Política Fiscal y Financiera, los consejeros populares, no están de acuerdo en una subida de impuestos por ser injusta e insolidaria, solicitando al Estado que asuma el gasto previsto por el déficit de la sanidad, cuando ya todas las autonomías tienen las transferencias en esta materia. Entiendo, que siendo el gasto sanitario el que se lleva aproximadamente el 50% de los presupuestos de cada autonomía abría que abordarlo con valentía y no solo mirar el voto. Evidentemente, sobre el alcohol debería incrementarse el impuesto, España, es el paraíso europeo donde más barato cuesta el alcohol y más alcohólicos existen de toda Europa, al tabaco le ocurre tanto de lo mismo en relación con el menor coste con el resto de Europa. Estos dos artículos, no son de primera necesidad, y además provocan a la larga graves enfermedades, con un costo adicional a la sanidad y que pagamos todos los españoles por igual. En relación con la gasolina, tampoco es un artículo de primera necesidad, hay determinados sectores que el Gobierno prima y seguirá primando, también es verdad, que vecinos de otros países fronterizos con España pasan a comprar la gasolina por ser más barata, por tanto no deberíamos rasgarnos las vestiduras y pagar con impuestos los servicios recibidos, además, existen ya algunas comunidades del PP que ya lo aplican. Sigue siendo España uno de los países comunitarios con menos carga fiscal, en relación con el impuesto directo del IRPF por tanto si queremos bienestar social, hay que pagarlo.
Finalmente, quería hacer una reflexión de la gestión de la sanidad pública. Por poner un ejemplo práctico, cualquier formulario que se derive de la visita al médico sigue haciéndose a mano y por tanto no se pueden controlar las recetas médicas, sobre todo en esta zona donde existe tanto desplazado y residente extranjero de la tercera edad. ¿Por qué seguimos dando en España el medicamento gratuito a los pensionistas extranjeros, cuando en esos países, nosotros no tenemos los mismos derechos? Controlar, vigilar y supervisar son buenas recetas para aminorar costes..
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