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Moratinos estima que la UE no definirá su futuro hasta 2007

El ministro duda de que las perspectivas financieras se pacten este año

El ministro de Asuntos Exteriores, Miguel Ángel Moratinos, afirmó ayer, ante los embajadores españoles en la UE y países candidatos al ingreso, que, pese a la crisis por el rechazo de Francia y Holanda a la Constitución europea, la Unión avanza hacia su definición. Pero dejó claro que no espera contar con esa definición hasta después de que, en 2006, se celebren las elecciones presidenciales francesas.

"Creo que en estos momentos críticos se está perfilando lo que va a ser" Europa, dijo el ministro, en los tres niveles claves que él mismo señaló como "el modelo económico, social y territorial". Añadió, sin embargo, que ese trabajo de definición seguirá desarrollándose "durante el resto de este año y todo 2006", mientras se despeja el panorama político en Francia y Alemania.

Cuando concluya ese proceso, la Unión tendrá su diseño definitivo y remitirá la inquietud de muchos de sus ciudadanos. "Yo no creo que la UE sea cuestionada por deficiencias en el funcionamiento de sus instituciones. Lo que refleja el rechazo a la Constitución son esos temores a lo que va a ser el futuro", dijo el ministro.

Según Moratinos, el diseño territorial, las fronteras definitivas de la Unión, ha quedado prácticamente cerrado la semana pasada por los ministros de Exteriores, con la confirmación de la apertura de negociaciones con Turquía el 3 de octubre. El ministro considera que, si se negocia la adhesión de Croacia, habrá que mantener también la puerta abierta al ingreso de Serbia y Montenegro. Por lo que se refiere a Ucrania, planteó, en cambio, un gran interrogante.

El Gobierno español, dijo también, se empeñará especialmente en el desarrollo comunitario en los capítulos de la reforma económica y social, seguridad y política exterior, como ha hecho siempre. Y por supuesto, en lograr un acuerdo sobre los presupuestos para el septenio 2007-2013.

Política agrícola

En ese contexto, reiteró que la Política Agrícola Común, a cuya reforma condicionan los británicos cualquier arreglo, ya fue revisada en 2003, por lo que "no sería oportuno retocarla de nuevo".

Moratinos consideró que el acuerdo sobre las perspectivas financieras será una señal muy positiva de que Europa sigue avanzando pese a la crisis constitucional, pero se mostró inseguro sobre si será posible cerrarlo bajo la actual presidencia británica, que concluye en diciembre.

El ministro de Asuntos Exteriores hizo estas manifestaciones, al inaugurar el curso diplomático con una reunión de todos los embajadores españoles en la UE y países candidatos al ingreso. Los reunidos escucharán, hasta el mediodía de hoy, las intervenciones del secretario de Estado para Asuntos Europeos, Alberto Navarro, y sus homólogos de Francia, Polonia y Portugal.

Cuando habló de las prioridades españolas en materia de política exterior común, Moratinos se refirió al viaje que ayer por la tarde emprendió a Oriente Próximo, para visitar Cisjordania, Gaza y entrevistarse con las máximas autoridades israelíes.

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