El asesino de Yoyes

Era el 10 de septiembre de 1986. María Dolores González Catarain, Yoyes, la primera mujer que entró en la ejecutiva de ETA, recorría una exposición de maquinaría agrícola en su Ordizia natal con su hijo Akaitz, de tres años. Yoyes había vuelto a su pueblo 11 meses antes tras acogerse a la reinserción.

Un hombre se le acercó por la espalda y le preguntó: "¿Tú eres Yoyes?". Ella respondió afirmativamente. "¿Sabes quién soy yo?", volvió a preguntar. Yoyes le replicó: "No", y el hombre se identificó: "Soy un miembro de ETA y vengo a ejecutarte". Ese hombre, José Antonio López Ruiz, Kubati, le disparó dos veces y, cuando cayó al suelo, la remató de un tiro en la cabeza. En presencia de su hijo.

El relato figura en la sentencia que condenó en 1991 a Kubati a 47 años de cárcel por ese crimen. En el juicio, el etarra, detenido en noviembre de 1987 en una operación que llevó por nombre el del hijo de Yoyes, consideró "alta traición" la decisión de su víctima.

Kubati suma más de 1.200 años de condena por una treintena de asesinatos consumados y frustrados. ETA, que en su día le calificó de "militante modélico", le nombró en octubre de 1999, todavía durante la tregua, uno de sus tres negociadores con el Gobierno.