La factura boliviana de Repsol
La Paz confirma que las compañías petroleras deberán duplicar el pago de impuestos
Bolivia sigue dando problemas a Repsol. El Gobierno ha ratificado la ley que obliga a las compañías petroleras a duplicar el pago de impuestos, desde el 16% al 32%, y a entregar regalías o royalties equivalentes al 18% de su producción. Para evitar graves efectos en sus cuentas, Repsol ha apelado a tratados bilaterales de protección de inversiones y ha aumentado su presencia en Perú y Canadá.
La compañía petrolífera ha decidido dar un golpe de efecto y ha anunciado una inversión de 325 millones de dólares en Perú
La nueva Ley de Hidrocarburos se suma a la serie de inconvenientes que la empresa española ha debido sortear en los dos últimos años, con diversas crisis políticas que han generado inseguridad jurídica, el descontento popular contra la empresa y el fin de uno de los proyectos más importantes para la compañía: la exportación de gas natural boliviano a California, un proyecto de más de 5.000 millones de euros que el propio presidente de la compañía, Antonio Brufau, dio por paralizado tras la última crisis institucional de marzo pasado.
El nuevo marco legal afecta principalmente a la empresa española. A través de Andina -dueña del 50% de la propiedad-, posee más del 39% de las reservas de petróleo en Bolivia y el 36% de las de gas natural, lo que la convierte en la principal productora del país y también la más expuesta, según datos de la Cámara Boliviana de Hidrocarburos (CBH). Este nuevo régimen tributario se ha producido en medio de fuertes presiones sociales que han provocado la destitución de dos presidentes en casi dos años. Y no conviene olvidar que el 9% de la producción de Repsol proviene de ese país.
Protección de amparo
Conscientes del efecto de estas medidas en sus cuentas, Repsol, junto a TotalFinaElf, British Gas, Vintage y Panamerican Energy -empresas que controlan el 70% de las reservas-, han pedido el amparo de los tratados vigentes de protección de inversiones entre Bolivia y sus países de origen, antes de recurrir a un arbitraje internacional en enero de 2006. Los plazos entre ambas posturas están lejos de encajar, por lo que los analistas creen que el plazo de tres meses impuesto por el Gobierno -180 días- será un momento en que las partes se sentarán a negociar. De hecho, la medida boliviana es considerada por algunos como la violación a los acuerdos alcanzados con el Fondo Monetario Internacional.
Con todo, los expertos discrepan del efecto real de las nuevas medidas para Repsol. Analistas de Citigroup Smith Barney han señalado que la compañía española es la petrolera europea más expuesta al nuevo marco impositivo y les recomiendan buscar nuevas opciones de inversión cuanto antes. A esto hay que agregar que es probable que se paralicen los planes de expansión de la compañía en Bolivia, que implicaban crecer hasta un 80% entre 2004 y 2008. La empresa ha señalado recientemente que invertirá 8.000 millones de dólares hasta 2009 en el eje Argentina-Bolivia-Brasil, aunque no se han detallado los montos por países.
Por el contrario, expertos de Venture Finanzas creen que el efecto Bolivia no es tan significativo en los resultados de Repsol en estos momentos, ya que la producción de hidrocarburos en el país -principalmente, gas natural- representa sólo un 9% de la producción total del grupo, mientras que su contribución al beneficio operativo llega sólo al 2,5% o 3,5%. Sin embargo, consideran que el efecto a medio plazo es significativo, ya que las reservas de hidrocarburos de Repsol en Bolivia representan alrededor de un 23% de las reservas totales probadas del grupo y el 40% en Latinoamérica. De hecho, en privado Repsol ha reconocido que el país andino era la mejor solución para sortear convenientemente las "inestabilidades argentinas".
La compañía, que no ha valorado el efecto de la nueva legislación boliviana, ha decidido dar un golpe de efecto y anunciar una millonaria inversión de 325 millones de dólares en Perú. El proyecto, que retoma el plan de exportar gas hacia California desde yacimientos bolivianos, consiste en la explotación de la zona de Camisea en asociación con la estadounidense Hunt Oil y la surcoreana SK. El acuerdo también implica comercializar en exclusiva los cuatro millones de toneladas al año de producción de gas natural licuado (GNL), equivalente al 15% de la producción actual de gas de Repsol.
Diversificación
El objetivo de esta operación es buscar la diversificación de los negocios en Latinoamérica. En primer lugar, para disminuir su exposición en Bolivia y mantenerse firmes en los principales proyectos de la región, y luego para evitar posibles efectos a largo plazo en las cuentas y proteger la cotización de la acción, que ha tenido uno de sus mejores resultados en el último año debido a la fuerte valorización de los precios internacionales del petróleo. En busca de esta diversificación, Repsol también ha consolidado recientemente negocios en Canadá, Trinidad y Tobago y Venezuela.
En Canadá, Repsol participa, junto a Irving Oil, en la operación de la primera planta de regasificación de GNL de la costa este del país, y que servirá para abastecer los mercados de la zona y la costa noreste de Estados Unidos, mientras que en Trinidad y Tobago ha invertido 229 millones de dólares en la compra de tres campos de petróleo y uno de gas natural a BP. Se presume que el gas de este país se podrá regasificar en Canadá. Finalmente, en Venezuela se ha formalizado un acuerdo con la estadounidense Chevron para explotar diversas reservas en el país, proyectos en los que también participará Petróleos de Venezuela. Repsol produce actualmente 220.000 barriles equivalentes de petróleo al día en el área del Caribe, de los cuales 100.000 provienen de sus bloques Quiriquire, Mene Grande, Quiamare-La Ceiba y Guárico Occidental, en Venezuela, y el resto de sus bloques de gas y petróleo en Trinidad y Tobago.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.
Archivado En
- Plataformas petroleras
- Bolivia
- Producción petróleo
- Relaciones económicas
- Política exterior
- Repsol
- Suministro petroleo
- Sudamérica
- Suministro energía
- América
- España
- Empresas
- Relaciones exteriores
- Finanzas
- Economía
- Petroleras
- Petróleo
- Combustibles fósiles
- Materias primas
- Combustibles
- Energía no renovable
- Fuentes energía
- Energía
- Industria