Gran Fondillón, la saga continúa

Desde la aparición en 1976 del primer fondillón recuperado (era de la cosecha 1959), este vino no ha dejado de progresar en el camino de restablecer la magnificiencia que tuvo en el pasado. Además de Salvador Poveda, la bodega que lo recuperó, otras se han decidido a seguir la estela. Bodegas Brotons y Alfonso de El Pinós; Bocopa, con su magnífico Alone; y naturalmente Primitivo Quiles de Monóver, que guarda en la solera de sus grandes barricas, memoria viva del Fondillón. También las bodegas Valle del Carche y El Sequé tienen Fondillón in progress, que podremos catar dentro de pocos años, cuando acabe la larga crianza que se le debe dar a este vino en las tradicionales botas alicantinas de 1.800 litros. La saga ha ampliado brillantemente sus fondillones con el que elabora en Villena Bodegas Navarro. Su Gran Fondillón es un clásico. Tiene un color clarete rancio brillante (mas de 15 años en barrica decantan y precipitan en el fondillo de la cuba toda la materia colorante y otras sustancias que crean la madre de la crianza). Es en este fondillo de cuba grande -de ahí su nombre- donde está el génesis del Fondillón.

El Gran Fondillón viene con una exquisita presentación pero lo mejor está dentro

Presente en las mesas reales y en los recetarios como el del Barón de Saint Simon -médico de Luis XIV de Francia-, el Fondillón se perdió cuando la filoxera destruyó la viticultura europea. Alicante se convirtió en la despensa de las bodegas de las zonas afectadas, ya que fue el último sitio en llegar esta plaga. Toda la producción del monastrell se vendía cara, y dejó de guardarse para el largo envejecimiento que necesitaba este vino. La institución que hubiera podido protegerlo, la Junta d'inhibició del vi foraster d'Alacant (la primera DO vinícola creada en Europa), había desaparecido en 1834 por un decreto de Madrid en su afán recaudatorio. Esta institución foral era una de las pocas que no había eliminado el terrible decreto de Nova Planta de Felipe V al finalizar la guerra de Sucesión y ante el boom de los vinos de Alicante de final del XIX hubiese podido producir un efecto regulador. En tal situación una institución basada en la filosofía del origen, es una institución.

El Gran Fondillón de bodegas Navarro viene con una exquisita presentación. Lo mejor naturalmente esta dentro. Tiene un buqué almendrado y profundo, rico en matices, con gusto a higos maduros, especies como la canela clásica en este longevo vino, y la curiosa mezcla de añejamiento con un gusto seco y abocado a la vez. El aroma a tabaco de Virginia es otra de las características clásicas del Fondillón, un vino para disfrutar en una larga sobremesa, y que antaño se tomaba con bizcochos, o acompañándolo con dulces de hidromiel, las legendarias almoixavenas. La recuperación de este vino ha sido algo comparable a la epopeya del moderno Israel. Una naturaleza perdida en el bucle de la historia, recuperada y renacida para los que piensan que ninguna especie debe desaparecer. Ha habido mucha fe en la recuperación de este vino, tanta como en el Oriente Medio, donde a pesar de las tragedias y dificultades, dos grandes pueblos puedan llegar a conseguir la paz que se merecen. Para todos aquellos que hemos luchado en la divulgación y protección del Fondillón vale aquel salmo del Libro de los Jueces, al saludar al gran Gedeón: ¡Oh Señor míralo, el vela por Israel, no duerme ni dormitara jamás! Al fin y al cabo el Fondillón es un patrimonio de todos.

Marca: Gran Fondillón 1964. Tipo: Fondillón. Precio: 42 euros. Bodegas: A y M. Navarro. Villena 03400 (Alicante). Teléfono: 34 96 580 14 86. Fax: 34 96 580 09 78. E-Mail: direccion@aymnavarro.com. Web:www.aymnavarro.com