Los accidentes mortales en el trabajo aumentan el 50% respecto a 2004

36 personas murieron en su puesto de trabajo en los primeros seis meses de 2005, frente a los 24 de 2004. Además, nueve trabajadores perecieron en el trayecto hacia su trabajo o de vuelta a su hogar, uno más que el año pasado. La cifra total de los accidentes en jornada laboral con baja aumentó el 18% en el mismo período, y los accidentes in itinere con baja ascendieron en la misma proporción. El incremento en la siniestralidad fue notablemente menor en otras comunidades autónomas. En Madrid, por ejemplo, la subida fue del 8% en los accidentes mortales, aunque en números absolutos los trabajadores fallecidos ascendieron a 87 en el primer semestre del año.

La provincia que más aumento relativo ha sufrido es Álava, con un incremento del 41% de los accidentes con baja en el trabajo, y del 150% de los casos mortales (cuatro en el primer semestre de 2004, 10 en 2005), y la que menos, Vizcaya (un 6% y un 21%, respectivamente). Entre mayo y junio de 2005, se observa en Euskadi un crecimientro leve de los accidentes con baja en el trabajo (de 4.397 pasan a 4.475), mientras que el número de muertos sigue igual, cinco en el trabajo y dos en el trayecto.

Las únicas cifras esperanzadoras de las que publicó ayer Osalan, el Instituto Vasco de Salud y Seguridad Laborales, son las de los accidentes que no provocaron la baja del trabajador: han disminuido un 36% en el lugar de trabajo y un 23% en el itinerario. Estos datos hacen que el total de los accidentes laborales ocurridos en la Comunidad vasca sea inferior este año, con 49.651 casos en vez de los 57.551 registrados entre enero y junio de 2004.

La publicación de las cifras de siniestralidad laboral coincidió con la muerte, ayer por la mañana, de un trabajador de 32 años, Ignacio S.B., que falleció electrocutado en las instalaciones de Aceros Olarra, en la localidad vizcaína de Loiu. El fallecido llevaba seis meses trabajando para la contrata de montajes eléctricos Sisteinge, que se dedica a labores de mantenimiento de la empresa en los períodos de parada por vacaciones. Según técnicos de Osalan, la descarga, de 380 voltios, se produjo cuando el operario trabajaba en la colocación de un interruptor dentro un cuadro eléctrico que estaba fuera de servicio. La descarga se produjo cuando la víctima tocó los bornes de la manguera que estaba suministrando electricidad.

UGT lamentó "una temporada terrible" en seguridad laboral e insistió en que el obrero pertenecía a una empresa subcontratada, El sindicato reiteró que la subcontratación suele ocasionar problemas de seguridad, al dar preferencia a la rapidez sobre las medidas de prevención. La central pidió limitar aún más esta forma de organización para salir de la "anarquía".

"Falla la prevención"

Por su parte, CC OO consideró que "ha tenido que fallar alguna medida preventiva", y lamentó una falta de "colaboración entre la empresa matriz y la subcontrata en materia de prevención", como lo establece la Ley de Prevención de Riegos Laborales. El sindicato concluyó que "la siniestralidad debe entrar a formar parte ya de la agenda política".

Desde el Gobierno vasco se mostró una "fuerte preocupación" por los accidentes en el trabajo, pero se subrayó que a más largo plazo existe una tendencia de descenso desde el año 2000. El departamento de Trabajo sigue apostando por planes de prevención sectoriales, como el programa desarrollado en la construcción, el sector con más accidentes laborales en proporción con el número de empleados, programa que integran todas las empresas del mercado.