Laja, Ziolar eta Eguren graban el sonido de las romerías

A partir de los años cincuenta empezaron a proliferar en las fiestas las orquestinas, o jazzbanas, que animaban las plazas interpretando piezas populares con acordeón, saxofón y batería. Esos instrumentos bastan también a Laja, Ziolar eta Eguren para animar cuantos saraos se les encarga con un cancionero que han resumido en Azken jazzbana (Elkar), su primer disco.

Marchas, pasodobles, fandangos, arin-arin, tangos, rumbas, valses, rancheras, boleros, incluso alguna reminiscencia circense y otros sones populares estrechamente asociados a las romerías constituyen la propuesta festiva y bailable de un trío que sigue la estela de otras jazzbanas encabezadas por Pedro Sodupe, Gelatxo, o Kaxiano Ibarguren. Precisamene, Enrique Eguren y José Makazaga, Ziolar, acompañaron a Gelatxo durante varios años.

Gure mandamentuak (Gor) es el título del estreno discográfico de Brigada Criminal, un conjunto de Lazkao que, pese a su nombre, sólo canta dos de los 12 temas en castellano. El euskera es el idioma al que recurre principalmente el cuarteto guipuzcoano, al que parece gustarle tanto el punk rock pujante, influido por bandas como Ramones y Rancid, como su vertiente más melódica, en clave de enérgico punk pop.

El disco incluye una adaptación de Heroia, canción de Frenopatiks que figura entre las favoritas de unos músicos que con anterioridad, entre 2001 y 2003, habían publicado una maqueta, un EP (extended play) de vinilo y Osti bi, un compacto compartido con Stupenda Jones.

Peiremans +

Las melodías son las auténticas protagonistas de la primera entrega de Peiremans +, un trío formado por miembros de Bide Ertzean, Berri Txarrak y Kashbad. Bonberenea Ekintzak ha publicado su primera grabación, entregada a una suerte de pop rock en euskera y un tanto indie, influenciada por el legado de bandas como Pavement. Pegadiza, pero armada con persistentes guitarras eléctricas.

El pop rock en euskera gobierna también SMS galduak (Gaztelupeko Hotsak), cuarta entrega de Xabaltx. En su caso, se distingue por el aura contemporáneo que confieren samplers y programaciones, lo que anima a su discográfica a afirmar que el artista vascofrancés "se ha ido alejando progresivamente del pop folk de sus inicios", hasta recalar en una especie de electro-pop.

Incluir reminiscencias de lugares remotos, como Islandia, India y África, figuró también entre las intenciones de Xabaltx en unas sesiones de grabación realizadas en Kilikas, el estudio de Niko Etxart. El repertorio también incluye defensas del euskera y cantos a la ciudad de Ámsterdam, y expresa el deseo de que no se vuelva a repetir una catástrofe como la del Prestige. Asimismo, el compact disc incluye el videoclip del tema Berdin ez, dirigido por Mherdadh Shirazi y Vergues Virgil.