El calendario de la reforma

Antes de su votación en el Pleno del Parlamento de Cataluña, trámite previsto para mediados de septiembre, el nuevo Estatuto catalán deberá ser aprobado en Comisión y ser analizado por el Consell Consultiu, que dictaminará sobre su constitucionalidad. Para cumplir los plazos establecidos, los juristas de este organismo trabajarán en agosto.

- Hasta el 27 de julio. Reuniones de la ponencia (integrada por un representante de cada grupo) para incorporar, rechazar o plantear textos transaccionales a las 554 enmiendas presentadas por los partidos políticos.

- 28 de julio. Publicación del informe de la ponencia en el Boletín Oficial del Parlamento catalán.

- 29 de julio. Se reúne la Comisión Primera del Parlamento para aprobar el dictamen de la proposición de ley del Estatuto. Los parlamentarios incorporarán al texto las enmiendas que sean aprobadas por la mayoría de los diputados. Los grupos pueden presentar una reserva si alguna de sus enmiendas ha sido rechazada. Éstas también se incluirán en el borrador del Estatuto pero a modo de anexo. Técnicamente, la comisión aprueba por mayoría el dictamen de la proposición de ley de la reforma del Estatuto.

- 1 de agosto. El Boletín del Parlamento publica el dictamen.

- 2 de agosto. Consejo Consultivo. Una vez publicado el dictamen en el BOPC, el Estatuto pasará al Consell Consultiu, órgano de la Generalitat que dictamina sobre la constitucionalidad de las leyes. Según la legislación, este informe lo pueden pedir el Gobierno de la Generalitat, dos grupos parlamentarios o una decena de diputados. El Partido Popular ya ha anunciado que exigirá la opinión del Consell Consultiu, pues dispone de 15 diputados. No obstante, la petición podría ser acordada por todos los grupos.

El Consell Consultiu tendrá un mes como máximo para dictaminar sobre la constitucionalidad no sólo del articulado del Estatuto sino de las enmiendas que los grupos hayan querido reservarse. Este órgano está integrado por siete miembros, dos a propuesta de Convergència i Unió (el ex diputado Jaume Camps y el ex consejero de Justicia Agustí Bassols); otros dos por el Partit dels Socialistes (el ex diputado Pere Jover y el catedrático de Derecho Administrativo Joaquín Tornos); y uno por el Partido Popular (el magistrado en excedencia Joaquim Borrell), Esquerra Republicana (el catedrático de Derecho Constitucional Jaume Vernet) e Iniciativa per Catalunya (el catedrático de Derecho Constitucional Marc Carrillo).

El dictamen se aprueba por mayoría de los consejeros, aunque si existen divergencias de criterio entre ellos pueden presentar votos particulares a la resolución.

- Principios de septiembre. El dictamen del Consejo Consultivo entra en el Parlamento catalán. La Mesa y la Junta de Portavoces abre un plazo, en principio de tres días, para que los grupos puedan presentar enmiendas al informe, en el sentido de incorporar al texto del Estatuto las observaciones constitucionales. No es obligatorio introducir estas correcciones si los grupos parlamentarios no lo solicitan. En el caso de que los partidos presenten enmiendas, estas se discutirán en la Comisión Primera, que aprueba sus resoluciones por mayoría. El dictamen que salga de la comisión va directamente al pleno y no puede volver al Consell Consultiu.

- Finales de septiembre. Una vez que la Comisión Primera haya aprobado el dictamen de la proposición de ley del Estatuto, el presidente del Parlamento debe convocar el Pleno de la Cámara. En él se discutirá y votará el articulado del Estatuto y las enmiendas que queden vivas. En este sentido, los grupos pueden retirar sus enmiendas o hacer transacciones con otros partidos, pero nunca presentar nuevas. Primero, se produce una votación por cada artículo, que debe aprobarse por mayoría. Al final, se realiza una votación de todo el conjunto de la proposición. Entonces, para su aprobación se requiere una mayoría de dos tercios; es decir, 90 diputados. Tras su aprobación, el dictamen se convierte en proposición de ley y se remite al Congreso de los Diputados. El presidente del Parlamento quiere enviar el texto a las Cortes a la mañana siguiente.