España y seis países más bloquean la reforma del azúcar en la UE

Cuando la UE inicia la negociación de la reforma de las ayudas al azúcar, España y otros seis países forman una clara minoría capaz de bloquearla. Italia, Polonia, Grecia, Portugal, Finlandia e Irlanda se situaron ayer en el bando español contra la propuesta de la Comisión Europea, que quiere reducir drásticamente los precios de remolacha y azúcar. La CE aprobó iniciar la negociación pesquera con Marruecos.

Enfrente se situaron, como estaba previsto, los grandes productores europeos: Francia, Alemania y, por supuesto, el Reino Unido, que preside este semestre la UE y que ayer confirmó su intención de aprobar esta reforma en noviembre próximo. En la calle, entre 6.000 y 8.000 remolacheros de toda Europa pedían en manifestación el abandono de una reforma que consideran extremadamente lesiva para la producción europea.

El resultado del primer debate sobre la reforma del azúcar en el seno del Consejo de Agricultura de la UE dio ciertas esperanzas a España sobre unas propuestas que, según considera la ministra Elena Espinosa, pueden terminar con la producción remolachera en la mayoría de las regiones españolas. Espinosa cree que el bloque favorable a la propuesta de Bruselas no es homogéneo y valoró ayer muy positivamente que países como Bélgica y Austria hayan abandonado el bando contrario para pasar ayer a oponerse moderadamente a la reforma propuesta por la comisaria de Agricultura, Marianne Fischer Boel.

La Comisión también dio ayer el pistoletazo de salida a las negociaciones pesqueras con Marruecos. Después de haber tendido los primeros puentes, la Comisión Europea podrá negociar oficialmente con Rabat un nuevo acuerdo pesquero. [El Consejo de Ministros de Agricultura y Pesca acordó ayer mantener el cierre de la pesquería de la anchoa los tres meses establecidos a pesar de las protestas de Francia].