Comercio prepara una reforma del decreto de grandes superficies
Desde 2001 el Gobierno ha autorizado la implantación de 13 híper
El Gobierno ha autorizado la implantación de 13 hipermercados y tres grandes centros comerciales desde que aprobó el decreto sobre grandes superficies en marzo de 2001. Esa norma, que modificó la existente desde 1998, ha supuesto un freno para las grandes superficies, al endurecer las condiciones para la instalación de este tipo de empresas ampliando los supuestos en que corresponde al Gobierno autorizarla o denegarla. El departamento de Industria y Comercio ha comenzado a elaborar un nuevo decreto que adapte la normativa a los continuos cambios del sector.
El objetivo del decreto de 2001 era mantener un sistema dual de comercio, que permita la difícil convivencia entre grandes empresas de distribución y los comercios minoristas. Pera ello, la Administración introdujo una serie de medidas cautelares para proteger el pequeño comercio local. Entre esas medidas figura la creación de la Comisión de Grandes Superficies, en la que están presentes el propio Ejecutivo, el sector comercial, la Asociación de Municipios Vascos-Eudel, consumidores, sindicatos y cámaras de comercio. Esta comisión tiene capacidad para emitir informes, proponer modificaciones y formular las propuestas que considere oportunas.
Cualquier negocio que pertenezca a lo que el decreto define como una gran empresa de distribución comercial debe presentar su proyecto a esta comisión para obtener la licencia de funcionamiento. Desde su constitución en marzo de 2001, por esta comisión de grandes equipamientos comerciales han pasado 91 proyectos de más de 400 metros cuadrados de superficie y se les ha dado el visto bueno a 86. De éstos, 33 son supermercados de entre 400 y 1.000 metros cuadrados; 26 son supermercados de entre 1.000 y 2.500 metros cuadrados y 13 son hipermercados. Además, se incluyen tres grandes centros comerciales. Dos se ubican en Vizcaya (Portugalete y Zaldibar) y el otro en Guipúzcoa (Rentería), Leroy Merlin.
El decreto actual sustituyó al que estaba vigente desde 1998 y que se quedaba muy corto al contemplar únicamente al sector de la alimentación y limitar la definición de gran superficie comercial a toda aquella que superase los 2.500 metros cuadrados. La normativa de 2001 redefine este concepto y ya no habla en términos de metros, sino que considera gran empresa de distribución comercial a la que tenga más de 250 trabajadores, más de 40 millones de euros de facturación o estén participadas en un 25% por firmas de estas características.
Cambios estratégicos
Además, tiene en cuenta más sectores que el de la alimentación porque en la estrategia de control del mercado, las empresas modifican sus tipologías comerciales y de actividad. Por ejemplo, el grupo Carrefour dispone de hipermercados, de supermercados con la marca Champion destinados a un tipo de consumidor y de otro tipo de supermercado, como Dia, con mayores descuentos y también con vistas a otro tipo de clientess. "Las grandes empresas han cambiado de estrategia y no se dedican sólo a la alimentación, sino que compiten en cualquier nicho de mercado emergente", indica el director de Comercio del Gobierno, José Luis Montalbán.
La velocidad a la que se desarrolla el sector de distribución comercial y los propios hábitos de los consumidores hacen que se queden viejas las normas que regulan este campo en apenas dos años. Por ello, Comercio ya está elaborando un nuevo decreto para regular la implantación y ampliación de las grandes empresas de distribución comercial. Según Montalbán, "la regulación se queda obsoleta en cuanto te das la vuelta". La previsión del Ejecutivo es que la norma se apruebe a finales de este año o en el primer trimestre de 2006.
El sector de la alimentación, tradicionalmente el estandarte de las grandes empresas de distribución ha variado y ya ofrece productos de cuarta gama (listos para servirse) y quinta gama (precocinados y listos para el consumo). "La oferta tiene que redefinir sus estrategias de forma constante", apunta Montalbán, quien admite que "ya hay cambios que aconsejan la modificación del decreto".
El director de Comercio asegura que será necesario redefinir parámetros como los gastos, consumo por habitante en alimentación, lo que venden los establecimientos por metro cuadrado y la parte que dedican los hipermercados a alimentación, que cada vez es menor. Lo que considera que no debe ser modificado es la definición de gran empresa de distribución comercial, que fue introducida en la normativa de 2001.
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