Washington reclama a Egipto y Arabia Saudí elecciones libres

La secretaria de Estado de Estados Unidos, Condoleezza Rice, lanzó ayer un desafío a sus más cercanos aliados en el mundo árabe, Egipto y Arabia Saudí, instándoles a abrazar la democracia mediante la celebración de elecciones, a liberar a los presos políticos, a permitir la libertad de expresión y a conceder derechos a las mujeres.

"Durante 60 años, mi país, Estados Unidos, ha perseguido la estabilidad a expensas de la democracia en la región, aquí, en Oriente Próximo, y no se ha conseguido nada. Ahora hemos tomado una nueva dirección y apoyamos las aspiraciones democráticas de todos los pueblos", subrayó Rice en un discurso pronunciado en la Universidad Americana de El Cairo. "Ahora hemos tomado otro camino. Apoyamos las aspiraciones democráticas de toda la gente".

Los comentarios de Rice, los más duros sobre el mundo árabe de un secretario de Estado, provocaron la reacción de las autoridades egipcias y de los grupos de oposición. Un responsable del Ministerio de Asuntos Exteriores aseguró que su país ya estaba planeando organizar elecciones libres, mientras la oposición pidió a Rice que adopte una línea más dura.

Las críticas de Condoleezza Rice a las prácticas del régimen egipcio fueron realizadas en un tono conciliador, y echó la culpa a su propio país por sus pasadas injusticias, desde la esclavitud a la discriminación racial, sugiriendo que Washington se mostró complaciente mirando hacia otro lado cuando sus aliados en el mundo árabe seguían con sus regímenes autocráticos y realizaban abusos contra los derechos humanos.

La secretaria de Estado llegó ayer por la tarde a Arabia Saudí procedente de El Cairo, en su quinta escala de su gira por Oriente Próximo.