El ex presidente mexicano Echeverría será juzgado por una matanza de 1971
La Corte Suprema considera que los cargos por la masacre de estudiantes no han prescrito
Por primera vez en la historia de México un ex presidente de la República podrá ser juzgado por un delito de violación de derechos humanos. La Primera Sala de la Corte Suprema de Justicia resolvió ayer por tres votos a favor y dos en contra, que el delito de genocidio contra el mandatario Luis Echeverría Álvarez, de 83 años, y el entonces secretario (ministro) de Gobernación, Mario Moya Palencia, por la matanza de entre 12 y 40 estudiantes del 10 de junio de 1971, no ha prescrito.
Los jueces del más alto tribunal ordenaron que se modifique la resolución en sentido contrario que había emitido el año pasado el juez federal César Flores. Asimismo, la Suprema Corte ordenó al quinto Tribunal Unitario en materia penal, con sede en Ciudad de México, que decida si dicta o no, orden de detención contra Echeverría y Moya por los hechos conocidos como la Matanza de Corpus, también llamada Halconazo. El fallo emitido ayer considera que los dos antiguos dirigentes políticos están en condiciones de afrontar el proceso, ya que los 30 años de prescripción que la ley mexicana prevé para los delitos empiezan a contarse a partir de 1976, año en que los imputados dejaron el poder y perdieron la inmunidad. El dictamen sí considera que ha prescrito el delito de genocidio imputado a los ex jefes policiales Miguel Nazar Haro y Luis de la Barreda Moreno, y a otros siete funcionarios de menor rango incriminados por la Fiscalía Especial para Movimientos Sociales y Políticos del Pasado, creada durante el Gobierno de Vicente Fox. Nazar Haro y De la Barreda tienen pendientes otros procesos por la presunta desaparición de decenas de personas durante la llamada guerra sucia hace tres décadas en México.
Juan Velázquez, abogado del ex presidente Echeverría, descartó que su defendido pueda ser detenido y expresó su convencimiento de que los cargos no se corresponden con el delito de genocidio. "Los jueces han dicho que en el caso abstracto de un genocidio, se puede perseguir", señaló el letrado. "Dudo que ningún magistrado considere que fue un genocidio o una política de Estado. Hubo un enfrentamiento, un acto lamentable de represión", añadió el defensor de Echeverría.
La acusación de genocidio levantó en su día polémica entre los juristas mexicanos, que consideran que los hechos no se ajustan a ese término. Tampoco ha convencido a algunos de los antiguos dirigentes estudiantiles que integraron la comisión de apoyo a la fiscalía especial. "El 10 de junio de 1971 ocurrió una masacre, matanza, carnicería, lo que quieran, pero no cumple el examen de admisión para el título de genocidio", declaró el escritor Luis González de Alba, líder estudiantil en aquella época.
En julio de 2004, la Fiscalía Especial solicitó una orden de aprehensión de Echeverría y 11 ex altos funcionarios. Sin embargo, un juez denegó la orden y cerró el caso por considerar que el delito de genocidio había prescrito, por lo que la Fiscalía Especial interpuso el 25 de agosto un recurso de apelación y solicitó la intervención del más alto tribunal mexicano.
Los sucesos que desembocaron en la matanza de Corpus comenzaron el 31 de marzo de 1971, cuando varios miles de estudiantes de la Universidad de Nuevo León, ocuparon el rectorado y expulsaron al rector. Exigían la derogación de la Ley Orgánica de la Universidad. En semanas posteriores, el movimiento estudiantil de Ciudad de México convocó para el 10 de junio una manifestación de apoyo. Cuando los manifestantes habían comenzado a avanzar, la policía se retiró y aparecieron más de 500 integrantes del grupo conocido como los Halcones, que agredieron a los manifestantes, primero con objetos contundentes y después con armas de fuego.
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