Un vídeo grabó al vigilante de la Hacienda guipuzcoana disparando a su superior

La Ertzaintza ha localizado una cinta de vídeo del sistema de seguridad del edificio de la Hacienda Foral guipuzcoana en la que se puede ver cómo el vigilante Manuel Ignacio Apaolaza mata en la mañana del pasado domingo de un tiro en la nuca a su compañero y superior Florencio Parra. El hallazgo, que ayer adelantó Radio Euskadi, esclarece la principal duda sobre el grave suceso que culminó en la noche de ese mismo día con un incendio provocado que destrozó por completo el edificio foral. El cadáver de Apaolaza, quien huyó tras los hechos, fue hallado en la tarde del martes con un disparo en el pecho y su revólver reglamentario al lado.

En el vídeo, que contiene la grabación de lo que sucedía en la estancia desde la que los vigilantes controlaban el interior de todo el edificio, se puede apreciar también cómo, tras disparar, Apaolaza trata de limpiar el charco de sangre extendida por el suelo. La cinta está datada en torno a las siete de la mañana del domingo.

Este vídeo no es el único que se salvó del fuego y ayudará a esclarecer muchas de las incógnitas que planean sobre el caso. Los investigadores disponen también de otra grabación que recoge a Apaolaza a las 22.30 de ese mismo día, 20 minutos antes de que una vecina diese el aviso de fuego a los bomberos. La cinta muestra al vigilante mientras prende unos papeles. Los bomberos destacaron posteriormente que los fuegos provocados -seis encendidos de forma independiente en distintas plantas- eran "rudimentarios", ya que para encenderlos se emplearon montones de papeles.

Fuentes de la investigación también indicaron ayer que Apaolaza guardaba en un bolsillo un texto manuscrito en el que, al parecer, se autoinculpa de la muerte de Parra. El cuerpo del vigilante huido fue encontrado a las afueras de San Sebastián en una zona boscosa junto al museo Kutxaespacio de la Ciencia, en el parque tecnológico de Miramón, en el que Apaolaza trabajó como vigilante años atrás.

Ante estas evidencias, la Ertzaintza confirmaba ayer que la principal hipótesis sobre lo ocurrido en el edificio de la Hacienda foral fue la que desde un principio se apuntó como más probable: Apaolaza disparó a su jefe Florencio Parra, con el que mantenía frecuentes disputas laborales, luego de una nueva discusión, y después incendió el edificio tras causar numerosos destrozos en las instalaciones. Luego acabaría quitándose la vida.

Aún se desconoce el resultado de la autopsia a Apaolaza y los resultados de balística que confirmarían si la bala que le mató salió de su arma reglamentaria.