¿Importamos?

Los vecinos de Patraix, Benimaclet, Torrefiel... hemos solicitado reiteradamente al Ayuntamiento de Valencia que no conceda más licencias para colocar antenas UMTS.

El oligopolio político -PP, PSPV y EU- ha llegado a un acuerdo a medida de las multinacionales del sector: "Las estaciones radioeléctricas cuyas antenas estén en visión directa de espacios sensibles (colegios, hospitales...) orientarán las antenas de manera que el eje no incida sobre dichos espacios".

Esto es una falacia y no resuelve el problema de la contaminación electromagnética. Los niños son igual de vulnerables cuando están en los colegios que cuando se encuentran en sus hogares.

Nuestros representantes tienen una memoria frágil, afirman que van a gobernar para los valencianos y que no van a defraudar a los ciudadanos, pero integran organizaciones cuya tarea principal no es el servicio público, sino la protección de clientelas e intereses específicos. Es indignante que legislen en perjuicio de la víctima de la vulneración de un derecho fundamental, favoreciendo la injerencia en el derecho a la intimidad del domicilio y a la vida privada y familiar, justificando su voto en la necesidad de respetar la disciplina de partido con objeto de tener la conciencia tranquila.

Esta dinámica dice poco en favor del aspecto ético de nuestros representantes municipales, quienes hacen un flaco favor al sistema democrático que debe basarse en la defensa de la voluntad popular.