Empleo y vivienda preocupan a los ciudadanos tanto como la paz

La pacificación ya no monopoliza las preocupaciones de los vascos. Sigue ocupando el primer puesto, pero prácticamente al lado se sitúan la demanda de empleo y de viviendas asequibles para todos. Ésta es una de las principales conclusiones de un estudio realizado por el Gobierno para analizar el comportamiento de los ciudadanos en las elecciones autonómicas del pasado 17 de abril.

En la encuesta realizada a cerca de 3.000 ciudadanos una semana después de los comicios, el Gabinete de Prospección Sociológica, dependiente de la Presidencia del Ejecutivo preguntó, entre otras cuestiones, por cuáles deben ser las principales preocupaciones del futuro lehendakari. Para la mayoría de la población, los tres principales aseuntos deben ser la pacificación (un 71%), "empleo para todos" (66%) y viviendas asequibles (65%). Incluso dependiendo de la orientación del votante, la vivienda ocupa el primer puesto. Es el caso de los votantes de EB (un 75% cita la vivienda como primer asunto frente al 68% de la paz) y los de EHAK, para quienes conseguir pisos más baratos y facilitar el acceso a una vivienda digna resulta tan importante como la pacificación (un 58% en ambos casos).

En comparación con los resultados que arrojó el anterior sondeo, en marzo de 2001, la pacificación ha bajado hasta 12 puntos (de un 83% al actual 71%), mientras que la cuestión de la vivienda ha subido de forma imparable entre las preocupaciones ciudadanas (del 42% en 2001 al 65% de ahora). Medio ambiente y euskera son los asuntos que menos preocupan.

Además de las diferencias entre votantes, por territorios también se aprecian diferentes comportamientos de los votantes. Así, en Álava la pacificación obtiene menos apoyos (66%) que en Vizcaya (72%) y Guipúzcoa (70%). En cambio, el respeto a los derechos humanos (22%) y la sanidad y educación (22%) logran un respaldo más amplio que en las otras dos provincias.

Consensuar un nuevo marco político y la igualdad entre hombres y mujeres ocupan el vagón de cola junto al medio ambiente y el euskera entre las preocupaciones de los vascos. El bienestar económico (18%), el respeto a los derechos humanos (17%) y la educación y sanidad (17%) se colocan en una posición intermedia.

La encuesta también se centra en conocer las preferencias sobre las futuras coaliciones de Gobierno. Un 44% de los vascos ve "muy bien" o "bien" la reedición del tripartito formado por PNV-EA-EB que gobernó la pasada legislatura. Un 42% también valora la presencia de Aralar en la coalición. Guipúzcoa es el territorio que mejor acepta la repetición del tripartito (51%) y Vizcaya se queda en el 42%. En Álava se produce el fenómeno de que un 34% aprueba la reedición del tripartito y un 33% lo ve "muy mal o mal", confirmando así que es la provincia menos nacionalista. La fórmula PNV-EA-PSE logra un 30% de respaldo.

Los resultados han arrojado un complicado panorama para formar Gobierno. El tripartito suma 32 escaños, que pueden ser 33 con Aralar, igual número de parlamentarios que PSE y PP. Tanto el actual lehendakari en funciones, Juan José Ibarretxe, como el líder socialista, Patxi López, han anunciado su candidatura para presidir el Ejecutivo. De confirmarse el previsible empate a 33, será el Partido Comunista de las Tierras Vascas (EHAK en su s siglas en euskera) quien decante el resultado.

Entre los votantes de esta formación, un 40% ve "muy bien" o "bien" la fórmula del tripartito, frente a un 22% que la rechaza frontalmente. Mejor valoración obtiene la coalición PNV-EA-EB-Aralar, que logra el 46% del apoyo entre los encuestados que declararon ser votantes de EHAK. Y tras las dos fórmulas de gobierno entre nacionalistas y EB, la coalición formada por PNV-EA-PSE obtiene un 30% del respaldo.

El interés con el que la ciudadanía afrontó las elecciones es otro de los aspectos analizados por el informe. En el 42% de los casos, los comicios autonómicos son la convocatoria electoral más importante. Sin embargo, para un 36% de los ciudadanos las elecciones del 17-A han tenido poco interés, dato que se confirma con el 38% de abstención registrada. La gran mayoría de los electores (83%) decidió su voto antes de la campaña y sólo el 11% lo hizo en ese periodo. Curiosamente, un 53% de los que votaron a EHAK dicen que decidieron apoyar sus listas antes del inicio de la campaña, cuando este partido era un gran desconocido. Un 42% decidió votarle durante la campaña, cuando Batasuna le respaldó públicamente.