PSOE y PP insisten en que hay voluntad de consenso en el Estatuto

Los socialistas andaluces creen percibir un "cierto cambio de actitud más constructivo y de mayor implicación" del Partido Popular en los trabajos de la ponencia para la reforma del Estatuto de Autonomía de Andalucía, después de una primera etapa en la que ha estado "viéndolas venir". Eso es lo que opina el portavoz del grupo parlamentario socialista, Manuel Gracia, quien evitó ayer cifrar el nivel de consenso alcanzado con el resto de los grupos, aunque cree que se dan las "condiciones suficientes" para llegar a un acuerdo. El PP insistió ayer en que es "altísimo" el grado de coincidencias.

El viernes próximo, la ponencia estatutaria terminará la primera fase de sus trabajos, en la que, a juicio del portavoz socialista, ha habido un "clima cordial y constructivo", muy distinto a la relación diaria entre las formaciones. "Hasta ahora el clima de crispación no ha salpicado a la ponencia", dijo en rueda de prensa en el Parlamento.

Para Manuel Gracia aún no ha llegado la hora de hacer un balance de la primera lectura del Estatuto, aunque cree que hay "condiciones más que suficientes" para afrontar con éxito la siguiente fase de discusión y llegar a un acuerdo. No obstante, el socialista eludió cifrar el nivel de entendimiento entre los cuatro grupos del Parlamento y, en concreto, con el Partido Popular, cuyo presidente regional, Javier Arenas, lo calificó ayer de "altísimo" y lo eleva al 90%.

No va a ser el PSOE el que desmienta, matice o rebaje estas cifras, al menos por el momento, y hasta en tanto sus asesores elaboren un documento en el que se puedan cuantificar los desencuentros y coincidencias.

Los socialistas no se fían nada del PP desde que regresó Javier Arenas a Andalucía y no quieren contribuir a generar unas expectativas de acuerdo que luego se puedan ver frustradas, como ocurrió con los pactos del llamado impulso democrático, de los que se descolgaron los populares en el último minuto.

Optimismo del Gobierno

De hecho, Gracia mantuvo ayer una actitud prudente, sin exhibir ni un gramo de optimismo, que contrastó con el que mostró horas más tarde la vicepresidenta del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega. En la conferencia de prensa posterior al Consejo de Ministros, la vicepresidenta opinó que existe "un altísimo grado" de consenso entre el PSOE y el PP sobre la reforma del Estatuto de Autonomía de Andalucía, lo que calificó de "muy buena noticia", según informa Efe. "Eso pone de manifiesto lo que el Gobierno ha sostenido desde el primer día, que las reformas estatutarias es bueno que se produzcan, se pueden producir dentro de los límites de la Constitución y con amplio consenso de los grandes partidos políticos", opinó De la Vega.

Gracia apuntó que el "cambio de actitud" del PP podría deberse al "llamado espíritu valenciano", en alusión al acuerdo alcanzado en la Comunidad Valenciana entre PP y PSOE para sacar adelante el nuevo Estatut. "Le damos la bienvenida a ese espíritu de acuerdo y de colaboración", dijo. El socialista enfatizó que el modelo de su partido para la reforma estatutaria no se inspira en ningún otro y que la senda del debate no la marca "nadie", sino ellos mismos.

En la misma línea que el portavoz socialista, pero más incisivo se manifestó el consejero de la Presidencia, Gaspar Zarrías, quien en vez de hablar de cambio de actitud dijo que el PP había "rectificado" su estrategia inicial dirigida "claramente a boicotear, dilatar y alargar en el tiempo los pasos", informa Javier Martín-Arroyo. Zarrías señaló que "varios acontecimientos de última hora han tirado por tierra esa estrategia diseñada por Javier Arenas", y los populares "parece que ahora establecen un porcentaje muy alto de consenso en los textos que estamos discutiendo".

Esos "acontecimientos" son para el consejero el acuerdo entre PP y PSOE en Valencia y el "importante acercamiento" entre los populares y el Gobierno tripartito catalán para buscar puntos de encuentro.