ERC advierte al Congreso de que "deberá ratificar" el Estatuto catalán y su financiación

Cataluña tendrá nuevo Estatuto "y con un nuevo sistema de financiación aprobado por una amplísima mayoría del Parlamento catalán". Además, ese Estatuto tendrá la aprobación del 90% de representantes de la Cámara autónoma. Éste es el augurio que anoche hizo el portavoz de Esquerra Republicana de Catalunya (ERC), Joan Puigcercós, con la advertencia, además, de que el Congreso de los Diputados deberá aprobarlo ya que dada esa mayoría que prevé, no valdrá "la excusa con la que cortaron el paso a lo que denominan plan Ibarretxe".

Sin entrar en detalles y en lo mucho que todavía les separa, el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, mostró su "plena confianza" en que habrá un diálogo fructífero "para la reforma del Estatuto y el nuevo modelo de financiación". Esta consideración la hizo Zapatero pasadas las once de la noche en el turno de réplica al dirigente de ERC. "Lo queremos hacer juntos, ordenadamente, razonablemente, claro está, con los principios que defiende el Gobierno de la nación y con la mejor voluntad".

El tono de ambos fue cordial. Desde luego, el de Puigcercós, que intentó hablar en catalán pero el presidente del Congreso, Manuel Marín, le pidió que no lo hiciera porque mientras no cambie el Reglamento no está permitido. Puigcercós aceptó de inmediato. El dirigente de ERC dio por seguro que el Estatuto que ahora está en discusión entre las fuerzas políticas de Cataluña tendrá un final feliz. "Contamos y contaremos con un amplio consenso político y social. Se lo aseguro. Y ustedes deberán ratificarlo. Repito, ratificarlo, porque será la expresión de la voluntad de los catalanes".

Para que no quedaran dudas, el representante de ERC recordó al presidente del Gobierno sus palabras del 13 de noviembre de 2003 en Barcelona, cuando se comprometió a avalar, con los votos del Grupo Socialista en las Cortes, el Estatuto que apruebe el Parlamento de Cataluña. Eso sí, cuando el líder socialista estableció este compromiso no estaba pensando en que el Estatuto podría llevar aparejado un sistema de financiación como el que ha avanzado a modo de borrador el Gobierno de Cataluña. El Ejecutivo de Zapatero ya ha anunciado que no puede avalar ese proyecto. Pero anoche Zapatero eludió la polémica con Puigcercós y se limitó a confiar en que todo saldrá bien.

Previamente, el político independentista desgranó los principios del modelo de financiación autonómica que buscan su partido y el Gobierno de la Generalitat. El sistema actual es "insuficiente e injusto" para hacer frente a las necesidades de Cataluña que soportan un déficit fiscal "sin parangón en ningún territorio de la Unión Europea". Pero Puigcercós no entró en detalles, sino que invocó el cambio del sistema para que sea "transparente, solidario, sin arbitrariedades del poder central".

Pero, además de la financiación, este diputado esbozó otros "déficit" que dificultan las aspiraciones de Cataluña. La ausencia de reconocimiento "plurilingüístico y pluricultural", así como "el frágil autogobierno" debido a que el Gobierno central ha abusado de la legislación básica, es decir de las leyes de bases, que "laminan" la legislación catalana. También demandó Puigcercós la participación en las instituciones centrales del Estado y la conversión del Senado en una Cámara territorial, en la que se plasmaría "el federalismo plurinacional".

Pero el portavoz de ERC aclaró que en la concepción política e ideológica de su partido entra de lleno "el reto social y la igualdad". "La izquierda no vive sólo del federalismo, de la descentralización, de la libertad. La socialdemocracia que compartimos con ustedes requiere trabajar por la igualdad de oportunidades·", señaló dirigiéndose a Zapatero.

Puigcercós dejó su oferta de apoyo al Gobierno para el final. Con bueno tono pero con condiciones. "Si usted no retrocede, nos tendrá como aliados. De hecho, en justa correspondencia, deseamos que usted también cuente con nosotros". Y eso será posible si el Gobierno de Zapatero "no retrocede en justicia social, radicalidad democrática y federalismo".

Hace un año, en el debate de investidura de Zapatero, ERC, al mostrarle su apoyo, aseguró que iniciaba una "estrategia de voluntad de entendimiento con la izquierda española en pro de la transformación social y plurinacional del Estado español". Esa apuesta estratégica se mantiene.