Zapatero asegura que no permitirá un referéndum sobre el 'plan Ibarretxe'

La esperada intervención del presidente del Gobierno, colofón a su implicación en la campaña en favor del aspirante socialista Patxi López, no defraudó. "La clave es una nueva mayoría que desbloquee" y que, según José Luis Rodríguez Zapatero, debería estar pilotada por un lehendakari socialista, no debería ser antinacionalista ni anti PP y busque un nuevo rumbo "entre todos" a un plan Ibarretxe que "ha fracasado" y no tiene ninguna virtualidad.

En su última intervención en esta campaña, el jefe del Gobierno realizó dos anuncios relevantes. El primero, dirigido a Juan José Ibarretxe en relación con la consulta que el lehendakari propone: "Ofrece una consulta para dividir, una consulta para ir a las urnas y que haya dos bloques, y eso no se va a producir. Y lo dice el presidente del Gobierno de este país, porque en este país las consultas son las que marcan las leyes". El segundo supuso un adelanto de su actitud como jefe del Gobierno de España cuando llegue al Congreso un Estatuto reformado. Los socialistas españoles lo aprobarán si cuenta previamente con el "apoyo de los dos tercios de la Cámara vasca".

El jefe del Ejecutivo augura que ésta será la legislatura "de la paz, la concordia y el autogobierno"

Patxi López: "Yo no venderé mi alma de izquierda al PNV. Para eso ya está Madrazo"

El presidente aceptará un Estatuto apoyado por dos tercios del Parlamento vasco

El presidente señaló que éstas no son unas elecciones más porque a partir del domingo si Patxi López lidera un "Gobierno de amplio apoyo, empezará la legislatura de la paz, de la concordia y de más autogobierno". Y empeñó "toda su capacidad política para que Patxi López sea el lehendakari de la paz". Zapatero interpretó que su compromiso está avalado "por millones de españoles".

El acto de ayer en la antigua Feria de Muestras de Bilbao fue la mayor demostración de capacidad de movilización del PSE-EE en esta campaña, con unas 5.000 personas. Zapatero y López llenaron. Al mitin acudieron una representación de todas las federaciones, el ministro de Administraciones Públicas, Jordi Sevilla, y el presidente de Aragón, Marcelino Iglesias. Por la mañana, Rodríguez Zapatero estableció la "hoja de ruta" que va a llevar López como lehendakari. En el programa Hoy por hoy, que dirige Iñaki Gabilondo en la cadena SER, explicó la idea de cambio que vislumbra para Euskadi cuando se abran las urnas. Pero también dijo que aunque los comicios arrojen un buen resultado para el candidato nacionalista, el plan Ibarretxe "ha fracasado" y es necesario buscar "entre todos los partidos vascos" un nuevo camino.

El jefe del Gobierno central indicó que los socialistas no estarán en ningún Gobierno frentista. "La mayoría nueva que se forme no debe ser ni antinacionalista ni anti PP", subrayó el líder socialista.

Pero el mensaje evidente que el presidente del Gobierno quiso anoche dejar en Bilbao fue el de la "paz y la concordia". En su larga intervención, muy acorde con la elaborada por Patxi López en defensa de los derechos de ciudadanía, quiso fijar el mensaje de "paz y concordia".

El jefe del Ejecutivo utilizó diferentes argumentos para tratar de convencer de que con el candidato socialista todos los vascos vivirán en paz. "Cuatro años lleva Euskadi empantanada, dividida, y lo sabéis bien, con familias que no pueden hablar de política y tanta y tanta gente sufriendo", casi clamó Rodríguez Zapatero. "Esto hay que cambiarlo y vosotros podéis traer la fuerza del cambio, con Patxi López, que tiene el compromiso generoso de unir".

Ya se quejó Rodríguez Zapatero de que en algunos sectores se extienda la impresión de que todo va a ser igual a partir del próximo domingo. A su juicio, ya existe un cambio relevante respecto a las elecciones de hace cuatro años. Entonces hubo dos frentes, con dos bloques nítidos, ganó el PNV "y luego vino el plan Ibarretxe".

Sin mencionar por su nombre al Partido Nacionalista Vasco, el líder socialista aseguró que para algunos "Euskadi es la excusa cuando la realidad es que sólo quieren el poder".

No quedó la menor duda anoche en la Feria de Muestras de Bilbao, donde se celebró el mitin, de que el presidente del Gobierno de España apoyará el proyecto "de convivencia" que propone Patxi López.

Zapatero, desde el Gobierno de Madrid, respaldará la mesa de la paz que quiere convocar el candidato socialista con todos los partidos políticos para luchar contra el terrorismo y también la segunda mesa o foro de reforma del Estatuto. Pero también Patxi López enfatizó esta eventual colaboración. "Yo y José Luis. El Gobierno vasco y el Gobierno de España, empujando juntos en la misma dirección, uniendo a todo el país para dar a las mujeres y a los hombres lo que más quieren: la paz".

En el acto participaron también el miembro del grupo cívico Aldaketa-Cambio por Euskadi Imanol Zubero y el líder de las Juventudes Socialistas vascas, Eduardo Madina. Juventudes que de nuevo aclamaron a su candidato al grito de "ari ari ari, Patxi lehendakari" y que agasajaron al presidente al grito de Zp irabazi arte (ZP hasta ganar). Eduardo Madina reivindicó en su intervención el concepto de ciudadanía frente a la división de la sociedad entre nacionalistas y no nacionalistas.

Imanol Zubero alertó a los votantes progresistas del sinsentido de apoyar a la Ezker Batua de Javier Madrazo, formación para la que él pidió el voto en 2001. Y dijo: "100.000 votos para Ezker Batua son 100.000 votos para el plan Ibarretxe".

López respondió a las acusaciones constantes del Partido Popular sobre su supuesta sumisión al nacionalismo. Tras citar a los socialistas vascos asesinados por la banda terrorista ETA, le espetó a la candidata popular: "No estoy dispuesto a admitir que la señora San Gil diga que me he vendido al nacionalismo, ni que rompo España, y mucho menos que flaqueo ante ETA". El pabellón casi se viene abajo por el griterío, los aplausos y el ondear de las banderas.

Pero también le dijo a Ibarretxe que el 18 de abril sólo merece la pena levantarse a las ocho de la mañana, como dice el propio lehendakari, "para inaugurar la legislatura de la paz, que es posible. No para discutir el plan Ibarretxe; para eso que se levante él solo".

Patxi López estableció un rosario de diferencias con respecto a Ibarretxe y se mostró ajeno a postulados nacionalistas. "Los ciudadanos son lo que de verdad importa, no los territorios, ni las banderas, ni las obsesiones identitarias", manifestó el candidato socialista a lehendakari. Además, López presumió de que su partido lleva 125 años presente en el País Vasco defendiendo en esa tierra la libertad, la solidaridad y la justicia.