El Encuentro de Religiones reclama al Estado que sea neutral ante las creencias

"Reconocemos que las religiones constituyen, a veces, un obstáculo para la práctica de los derechos humanos en la sociedad y mucho más en su seno". Este es uno de los puntos del manifiesto de la Asociación para el Diálogo Interreligioso en Madrid (ADIM). Su presidenta, la teóloga Margarita Pintos, lo expuso este fin de semana en la apertura del II Encuentro de Religiones, dedicado este año al tema Libertad religiosa y Estado laico y que reunió en Madrid a dirigentes de una docena de religiones. En la apertura intervino la directora general de Asuntos Religiosos, Mercedes Rico.

Los creyentes de las diferentes tradiciones participantes (católica, islámica, judía, budista, Fe Bahá'í, Hare Krisna, Brama Kumaris, Sij) coincidieron en la necesidad de plataformas para poder dialogar con el Estado y reformar o desarrollar leyes y acuerdos de cooperación que muchas veces impiden el ejercicio de los derechos religiosos y que dejan insatisfechos a la mayoría. Todos pidieron la neutralidad del Estado para garantizar la igualdad de derechos para todas las tradiciones religiosas porque "el número de miembros no debe ser un criterio de ayuda o de exclusión".

El encuentro abordó estas cuestiones desde el ámbito político, cultural y sobre todo de las diferentes tradiciones religiosas. Entre los ponentes estaba el ex diputado socialista Luis Gómez Llorente, que hizo un recorrido por los filósofos que han desarrollado el concepto de laicidad, destacando la postura neutral que debe mantener el legislador. "Es necesario que el Estado administre lo público con neutralidad para que sea de todos".

El teólogo Juan José Tamayo, de la Universidad Carlos III de Madrid, invitó "a las religiones a colaborar, desde sus tradiciones liberadoras originarias en la construcción del Estado laico en una sociedad intercultural e interreligiosa. "Libertad religiosa y libertad de conciencia son inseparables", dijo antes de subrayar que en España "el Estado no reconoce por igual la libertad religiosa a todas las religiones, porque: a) la Constitución privilegia a la Iglesia católica, a quien cita expresamente en el artículo 16.3; b) firmó con la Iglesia católica unos acuerdos que son preconstitucionales y de rango internacional, anteriores a la Ley de Libertad Religiosa, frente a los acuerdos con el islam, el judaísmo y las iglesias evangélicas de 1992, que son de rango nacional y en muchos temas no se han cumplido".

En el encuentro también intervino José María Martín Patino, presidente de la Fundación Encuentro, que jugó un papel fundamental en el debate constitucional y en la elaboración de la Ley Orgánica de Libertad Religiosa.