Una selectividad renovada

Los alumnos obtendrán el título de bachillerato una vez superados los dos cursos de esta etapa, sin necesidad de superar ninguna reválida, como establecía la Ley de Calidad. Este título les dará acceso a la Universidad, tras superar una prueba, y a la Formación Profesional Superior, de forma directa.

La nueva norma establece que habrá una única prueba de acceso a la Universidad. Tendrá el doble objetivo de medir el nivel de conocimientos y madurez de los alumnos y de regular su entrada en las titulaciones en las que haya límite de plaza.

Este mismo sistema era el establecido legalmente antes de que el PP promoviera la aprobación de la Ley de Calidad, que en este aspecto no se ha llegado a aplicar. La Ley Orgánica de Universidades, también de la etapa popular, permite a los centros superiores hacer pruebas de acceso.

La regulación definitiva de este tipo de examen será aprobada mediante un real decreto. Será, por lo tanto, una selectividad renovada, en la que, como ya ha anunciado el ministerio, tendrán más peso en la nota final las materias relacionadas con la carrera que se quiera cursar. El ministerio estudia la posibilidad de incorporar en ella una prueba oral de inglés.