Los socialistas instan al Consell a acometer las obras del plan hidrológico que corresponden a la Generalitat

Las Cortes Valencianas reanudarán la actividad parlamentaria el próximo 4 de abril con un pleno de carácter monográfico sobre el agua. Rafael Maluenda, portavoz del PP, reiteró ayer las críticas que el Consell y el partido que lo sustenta han dirigido al Gobierno central desde que se derogaron las obras del trasvase del Ebro. Andrés Perelló, portavoz del PSPV, por su parte, avanzó que los socialistas pretende aclarar "la confusión" interesada que atribuye al Consell entre la derogación del trasvase y el conjunto de obras previstas en el Plan Hidrológico Nacional que "no se han derogado". Perelló instó al Consell a acometer sin dilaciones las 46 obras de mejora de regadíos, canalizaciones y otras infraestructuras accesorias que están previstas en el Plan Hidrológico Nacional y que siguen pendientes. Según el portavoz socialista, la Generalitat apenas ha acometido tres acciones de poca importancia.

Al margen del debate en sí, portavoces parlamentarios del PP y del PSPV se han enzarzado en una disputa previa sobre la paternidad de la iniciativa que envenena el ambiente previo al pleno de las Cortes Valencianas.

Los socialistas solicitaron la reunión de la diputación permanente el pasado 21 de marzo para exigir al Consell que se pronunciara sobre el programa AGUA que impulsa el Gobierno y sobre las obras de su responsabilidad vinculadas al plan hidrológico.

La junta de portavoces ni siquiera se reunió para considerar la solicitud. Pero el PP pasó a la ofensiva y "retó" a los socialistas a un debate monográfico sobre los problemas hídricos de la Comunidad Valenciana.

El socialista Perelló respaldó ayer la propuesta del PP para dedicar el primer pleno del próximo periodo de sesiones a un debate sobre el agua. Pero anticipó que los socialistas expondrán en las Cortes Valencianas "los negocios que estaban previstos en torno a las obras del trasvase del Ebro tomando a los agricultores como una mera coartada y no como objeto principal de atención". Según Perelló, el PP y el Consell utilizan el agua "como un arma electoralista" y el plan hidrológico "como un negocio, no como un tema de interés general de los valencianos".

El popular Maluenda, por su parte, celebró el respaldo de los socialistas al pleno y aseguró que los dirigentes del PSPV "no saben como justificar todas las decisiones del Gobierno socialista, que no han hecho más que agravar el déficit hídrico de la Comunidad Valenciana y poner en peligro su desarrollo". Maluenda avanzó que el PP considera el programa AGUA " el mayor fraude a la Comunidad Valenciana en la historia de la democracia".