Los sindicatos adelantan al 8 de abril el paro general en Osakidetza para lograr más eco

La comarca sanitaria de Álava vivió ayer la última jornada de huelga parcial en la sanidad vasca organizada por ELA, SATSE (enfermería) y el Sindicato Médico en demanda de mejores condiciones de trabajo. Según los tres sindicatos, que ostentan la mayoría en la mesa de negociación, la movilización fue un éxito con un seguimiento del 70% en los hospitales y de un 75% en atención primaria. Los organizadores de los paros han decidido aumentar la presión sobre el Departamento de Sanidad, adelantando al 8 de abril la huelga general prevista en Osakidetza.

Los planes iniciales de los convocantes de las movilizaciones pasaban por celebrar ese paro general el día 22 de abril. Ayer invocaron el "gran seguimiento" de las huelgas parciales para anunciar que adelantan la fecha y la sitúan justo nueve días antes de las elecciones autonómicas y en plena campaña, con lo que la repercusión de su actuación será más relevante. Ese paro supondrá la traca final de unas movilizaciones que comenzaron el pasado 17 de febrero en la comarca de Vizcaya interior y que se han prolongado hasta la jornada de ayer en Álava. En total han sido seis huelgas escalonadas cuyo seguimiento ha sido un "éxito", según los organizadores, y un "fracaso", en opinión de la dirección del Servicio Vasco de Salud.

ELA, SATSE y Sindicato Médico, que cuentan con el 80% de los delegados en la mesa sectorial de negociación y cerca del 60% de la representación de los trabajadores de Osakidetza, han justificado el adelanto del paro general por la necesidad de responder de una forma más "contundente" contra la actuación "irresponsable" del consejero de Sanidad, Gabriel Inclán. Los sindicatos reprochan a Inclán su intento de "imponer" unas condiciones de trabajo que no abordan los problemas de fondo que han motivado el conflicto.

Entre esos motivos figuran la falta de inversiones, la ausencia de una relación de puestos de trabajo (RPT) y el progresivo deterioro de las condiciones de trabajo del personal sanitario. "El consejero", añaden los sindicatos, "ha gestionado de manera nefasta y autocomplaciente estos cuatro años de legislatura para acabar imponiendo un acuerdo con la minoría".

El Gobierno aprobó el pasado martes un decreto regulando las condiciones de trabajo para el año 2005 en el que se incluían los términos del acuerdo cerrado entre la dirección de Osakidetza y LAB, Comisiones Obreras y UGT. Estas tres centrales sólo cuentan con el 20% de la representación en la mesa de negociación, dónde sólo se sienta LAB, ya que las otras dos centrales no lograron los votos necesarios para acceder.

Compás de espera

Precisamente, ese acuerdo ha sido recurrido ante el Tribunal Superior de Justicia del País Vasco (TSJP) por los convocantes de los paros, que consideran que Osakidetza no puede negociar en una situación de huelga, como hizo, y con centrales minoritarias. El efecto buscado por la Administración con la firma del pacto, según los recurrentes, es menoscabar la eficacia de las movilizaciones.

Aunque el paro del día 8 de abril es la última movilización prevista, ELA, SATSE y Sindicato Médico anunciaron que el conflicto podría continuar tras las elecciones, dependiendo de quién asuma la cartera de Sanidad y su voluntad de negociar. Las centrales abrirán un compás de espera tras los comicios, dando un margen de confianza al nuevo titular de Sanidad.

La jornada de paro vivida en Álava volvió a ofrecer cifras dispares en cuanto a seguimiento, según quién fuera la fuente de información. Los sindicatos cifraron en un 70% de respaldo logrado en los hospitales, mientras que la Administración lo redujo a un 10%. Una vez finalizada la ronda de paros, la dirección de Osakidetza ofreció ayer un dato novedoso para reforzar su tesis de que las huelgas han tenido "un escaso" seguimiento por parte de los trabajadores. De una plantilla de 22.416 trabajadores, el descuento en nómina se realizará a 2.006, es decir un 8,9% del total.

"Por mucho que se empeñen los sindicatos e insistan en un masivo seguimiento, la realidad es que sólo el 8,9% de la plantilla ha secundado los paros", apuntaron los dirigentes de Osakidetza, quienes ofrecieron su tradicional rueda de prensa de seguimiento del conflicto en Bilbao, en lugar de Vitoria donde el Servicio Vasco de Salud tiene su sede central y desde donde ha venido informando. Los huelguistas se pasaron ayer más de una hora concentrados frente a esta sede.