La contaminación atmosférica causa 310.000 muertes en Europa cada año
La UE halla un panorama peor de lo esperado al preparar un plan de calidad del aire
La contaminación atmosférica constituye todavía un grave problema de salud en Europa y causa la muerte prematura de unos 310.000 ciudadanos cada año, según los datos recogidos por la Unión Europea como preparación de una estrategia para mejorar la situación que será adoptada próximamente por la Comisión. Las partículas en suspensión y el ozono a baja altura constituyen las mayores preocupaciones de los expertos. España se encuentra en un nivel intermedio en cuanto a contaminación atmosférica y pierde casi 14.000 ciudadanos prematuramente sólo por las pequeñas partículas.
La situación es peor de lo esperado porque no existe, al contrario de lo que se creía, un nivel seguro de contaminación, que no perjudique la salud o el medio ambiente, según un reciente informe de la OMS. Y la recogida de datos para el programa Aire Limpio para Europa ha supuesto una sorpresa desagradable para muchos expertos, que no tenían una visión global de la situación. Sin embargo, al introducir en el estudio preliminar el efecto de las medidas que ya se están tomando se prevé una mejora notable de la situación en los próximos 15 años.
En la actualidad, los efectos perjudiciales sobre la salud, siempre desde el punto de vista estadístico, son similares en escala a los producidos por el consumo de tabaco. Además, se acumulan a éstos, ya que son muchos los fumadores que ven agravada su situación por la contaminación atmosférica y entre ellos se da el mayor número de muertes prematuras.
La peor situación en Europa la tienen los países del área de Benelux, el norte de Italia y los nuevos Estados miembros, explican los expertos en los documentos presentados para la reunión de la estrategia Aire limpio para Europa que comienza hoy. En Holanda, por ejemplo, el número de los fallecimientos prematuros por el efecto de las partículas en suspensión fue casi igual en 2000 que en España, a pesar de la diferencia de población, mientras que en Polonia la cifra es del doble.
Partículas y ozono
La contaminación atmosférica no afecta sólo a los fallecimientos prematuros sino también al número de enfermos. Cada europeo que trabaja está de baja médica 0,5 días al año por diferentes enfermedades relacionadas con la contaminación, lo que equivale, según cifras facilitadas por la Comisión Europea, a una pérdida económica de 80.000 millones de euros.
Las partículas, el contaminante más preocupante, proceden de la combustión de combustibles fósiles -en automóviles, centrales térmicas e industria sobre todo- y se dividen entre las que son mayores de 10 micrómetros (el polvo vulgar) y las menores de ese diámetro. Incluso las muy pequeñas, las de 2,5 micrómetros o menos, pueden penetrar muy profundamente en el aparato respiratorio y producir efectos cardiorrespiratorios adversos, según los expertos.
La estrategia europea consiste en urgir a los Gobiernos a que apliquen en su totalidad las medidas para disminuir la contaminación atmosférica contempladas en directivas ya existentes de obligada transposición, de forma que en 2020 los parámetros actuales mejoren considerablemente. A pesar de ello, se cree que todavía en ese año habrá más de 200.000 fallecimientos prematuros por esta causa en Europa.
Los expertos convocados por la UE creen que son este tipo de medidas, como el establecimiento de límites nacionales a las emisiones de distintos contaminantes, las que pueden resultar más efectivas a medio o largo plazo. Las medidas locales coercitivas a corto plazo, como las restricciones al tráfico cuando, debido a condiciones atmosféricas, se produce un aumento puntual de los contaminantes, son consideradas poco eficaces, ya que no atacan la raíz del problema. Sin embargo, se recomienda que las autoridades locales se impliquen en tomar medidas para disminuir la contaminación, especialmente en lo relacionado con las industrias contaminantes y el estímulo del transporte menos contaminante.
Además de la salud, la contaminación atmosférica afecta al medio ambiente. Es una fuente de acidificación de bosques, lagos y ecosistemas. El ozono perjudica las cosechas y la contaminación afecta negativamente a los edificios. Todos estos efectos serán también contemplados en la estrategia europea.
16.000 víctimas en España
Los datos sobre contaminación atmosférica en España reflejan su situación entre los países de industrialización media en proceso de modernización en Europa, así como las mayores concentraciones urbanas en su territorio. Las peores zonas -si se toma como muestra la disminución de la esperanza de vida debido a las partículas más pequeñas - son las mayores ciudades (Madrid y Barcelona) junto a focos industriales del norte del país y la más dispersa concentración industrial catalana.
En total, teniendo en cuenta todos los elementos contaminantes, unos 16.000 españoles son víctimas mortales de la contaminación. Si se ponen en marcha las medidas previstas en la legislación vigente, la situación mejorará en 2020, el horizonte previsto por el plan europeo para limpiar el aire. La pérdida de esperanza de vida debido a las partículas, por ejemplo, pasará de 5,1 meses a 3,2. Es lo mismo que decir que ahora se producen, sólo por las partículas, 13.939 fallecimientos prematuros al año y en 2020 serán sólo 10.500. El gasto sanitario también disminuirá y está cuantificado en los informes que se han elaborado en casi la mitad en 20020 respecto a 2000. El ozono a baja altura causa ahora 1.926 muertes, que se reducirán a 1.468.
En algunos contaminantes, sin embargo, las previsiones para España no son satisfactorias. La mejora prevista en las emisiones de óxidos de nitrógeno para 2010 (964 kilotoneladas) es superior al límite nacional previsto en la directiva europea (847 kilotoneladas).
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