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Reportaje:

Agitación en la Academia

De los 1.050 miembros de la institución de cine, los actores conforman, con 290, el gremio más numeroso

Rocío García

Elsa Pataky entra en la Academia de Cine y Pedro Almodóvar se va. La misma junta directiva que dio cuenta el viernes de la decisión del director Pedro Almodóvar y de su hermano Agustín, productor, de romper la relación que desde 1987 les unía con la institución cinematográfica, estudió también el alta solicitada por la actriz Elsa Pataky, que se dio a conocer con la serie juvenil de Tele 5 Al salir de clase. El cineasta español más internacional y admirado fuera de nuestras fronteras, ganador de dos oscars de la Academia de Hollywood y de los más prestigiosos premios cinematográficos mundiales, no se siente querido en la Academia. Su hermano Agustín, quien ha explicado las razones de la decisión, denunció el sistema de votación que rige en los premios Goya, así como otros aspectos del funcionamiento de la Academia, como la falta de información sobre el número de votantes en las distintas selecciones.

Las votaciones de los Goya sólo son válidas si ejerce su derecho un 40% de los electores
El cambio en el nuevo sistema de votación se realizó mediante consulta por correo
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Según datos ofrecidos por la Academia de Cine, a falta de los últimos ajustes, el número total de miembros de la institución que preside Mercedes Sampietro desde octubre de 2003 es de 1.050. Repartidos en 13 especialidades, los actores, con 290 miembros, son el grupo más numeroso, seguido de los realizadores, con 170 académicos, y de los productores, con 143. El resto de las especialidades no llega al centenar de miembros -dirección artística (34); dirección de producción (61); diseño de vestuario (30); efectos especiales y animación (51); fotografía (43); guión (65); maquillaje y peluquería (37); montaje (41); música (43) y sonido (42).

El sistema de votación, adoptado desde septiembre de 2002, y que ya se utilizó en anteriores ocasiones (1987-1988 y 1997), consiste en que en la primera ronda cada miembro elige cuatro candidatos de la especialidad a la que pertenece, excepto los galardones considerados genéricos -película, película de animación, filme documental, película europea y filme extranjero de habla hispana-, que los eligen todos los miembros. En la segunda ronda, todos los académicos pueden votar a todos los candidatos de la primera selección.

Según los estatutos de la institución, las votaciones a los premios Goya sólo son válidas si ejercen su derecho al menos el 40% de los electores, tanto en la primera como en la segunda fase. Un ejemplo: en el caso de los músicos, para la elección de los cuatro finalistas al premio, tienen que votar al menos 17 miembros de esta especialidad. Para la votación final tendrían que ejercer su derecho al voto algo más de 400 académicos.

Este dato fue ofrecido en la noche del jueves por el actual vicepresidente primero de la Academia, el director y guionista David Trueba, ante las acusaciones por parte de algunos académicos de falta de transparencia y de escasa participación. La Academia también establece en sus estatutos que bajo ningún concepto se darán a conocer el número de votantes ni el de los votos conseguidos por cada una de las películas. Estos datos quedan en poder del notario, que es quien va entregando los sobres cerrados con el nombre del ganador a los presentadores de los premios según van saliendo al escenario de la gala.

Según recuerda el realizador Joaquín Oristrell, el cambio en el sistema de votación se realizó siendo él vicepresidente de la Academia (de diciembre de 2000 a octubre de 2003). "Como la gente no va a las asambleas pues suelen ir nada más que un 10% de los miembros, se decidió realizar una votación por correo y se envió la propuesta a todos los académicos. Yo también estoy en contra de este sistema de votación pero es el que se decidió democráticamente. Almodóvar es un cineasta muy representantivo. Personalmente, yo me quedé turulato cuando vi que La mala educación sólo tenía cuatro candidaturas. Creo que es un filme que se merecía muchas más nominaciones: la música, los actores secundarios, el actor revelación, el maquillaje... pero eso fue lo que decidieron los miembros de la Academia. Almodóvar tiene todo el derecho del mundo a irse". El director y productor Gerardo Herrero, ex presidente de la Academia, asegura que no le parece correcto que los Almodóvar "den la espantada porque no están de acuerdo con el sistema. Yo tampoco estoy de acuerdo y sé que hay mucha gente que tampoco, pero que se queden y lo discutimos en el seno de la Academia. Es verdad que el actual sistema provoca distorsiones porque son grupos muy pequeños de especialidades. A mi no me parece que la música de Mar adentro sea la mejor del cine español de este año pero fue la más votada".

El amor de muchos de los miembros con la Academia parece la flor de un día. Como apunta David Trueba, los premios Goya se han desorbitado y, por ello, puede que el pastel sea más apetitoso que antes. Luego todo se olvida y, por ejemplo, cuando llega la hora de elegir presidente los académicos miran hacia otro lado, como recuerda el ex presidente José Luis Borau. "La Academia tiene fuerza, funciona, ha demostrado que puede ser una excelente tribuna, pero hay que cuidarla".

Presidentes de la Academia, en la gala de los Goya de 2004. De izquierda a derecha, Marisa Paredes, Aitana Sánchez Gijón, Mercedes Sampietro, José Luis Borau, Gerardo Herrero y Antonio Giménez Rico.
Presidentes de la Academia, en la gala de los Goya de 2004. De izquierda a derecha, Marisa Paredes, Aitana Sánchez Gijón, Mercedes Sampietro, José Luis Borau, Gerardo Herrero y Antonio Giménez Rico.BERNARDO PÉREZ
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