La Generalitat y Barcelona activan planes para afrontar la ola de frío

La ola de frío que se prevé que invada toda Cataluña a partir de hoy causó ayer las primeras nevadas en cotas muy bajas y obligó a las administraciones a activar sus planes de emergencia. Algunos ayuntamientos, como el de Barcelona, reforzaron sus dispositivos de acogida de personas sin techo.

Aunque de forma muy débil, la nieve hizo acto de presencia ayer por la tarde en zonas donde este tipo de precipitaciones son excepcionales, como La Jonquera y Figueres (Alt Empordà), Banyoles (Pla de l'Estany), o varias poblaciones del Vallès Oriental y el Maresme. En la montaña del Tibidabo y en la zona de mayor altitud de la ciudad de Barcelona cayeron por la tarde copos de aguanieve que no llegaron a cuajar.

El Servicio de Meteorología de Cataluña prevé para hoy temperaturas medias de 10 grados bajo cero en el Pirineo y de hasta 5 grados bajo cero en el litoral. Los termómetros, sin embargo, seguirán cayendo entre mañana y el viernes, de modo que se originará una situación climatológica de gélidas temperaturas que no se registraba desde el año 1985.

Las administraciones recomendaron ayer que se eviten desplazamientos, especialmente en las zonas con mayor riesgo de nevadas o heladas. Para minimizar los efectos del temporal a las personas que se vean obligadas a viajar, el Departamento de Política Territorial y Obras Públicas de la Generalitat empezó ayer a arrojar sal sódica y potásica en las carreteras del Pirineo, en el llano de Lleida y en la zona noreste de Cataluña, especialmente en la frontera de La Jonquera.Ferrocarrils de la Generalitat y la compañía Renfe pusieron en marcha también sus dispositivos especiales en caso de nevadas o hielo en sus respectivas redes ferroviarias. Todas las estaciones de tren se abastecieron ayer de sal y las empresas pusieron a punto los aparatos quitanieves para limpiar las vías si fuera necesario.

En las zonas de montaña, la Dirección General de Emergencias y Seguridad Civil de la Generalitat activó ayer la alerta del Plan Neucat. Los ayuntamientos, las diputaciones y los consejos comarcales fueron advertidos del peligro de que caigan fuertes nevadas. También se alertó a hospitales, empresas de transporte escolar e instituciones encargadas del mantenimiento de las carreteras. Ayer por la tarde, la Generalitat cerró el Port de la Bonaigua.

Varios municipios reforzaron ayer sus dispositivos de acogida a personas sin techo. En la ciudad de Barcelona, el Ayuntamiento habilitó desde ayer 75 camas, un servicio de comedor y duchas en el Pabellón de la Mar Bella. Se trata de una operación especial que se suma al plan de acogida de indigentes que el consistorio pone en marcha todos los inviernos. Desde anoche y mientras dure la ola de frío, cinco equipos integrados por un total de 30 profesionales, a los que reforzarán voluntarios de la Cruz Roja, recorrerán las calles para descubrir usuarios potenciales del servicio y ofrecerles cobijo.

Ricard Gomà, concejal de Bienestar Social del Ayuntamiento de Barcelona, destacó ayer que este dispositivo especial duplica los recursos humanos y materiales del plan que se activó durante los días más fríos del invierno pasado. El traslado al centro de acogida ofrecido por el Ayuntamiento es voluntario, y los profesionales que trabajan para éste topan a menudo con la resistencia de quienes pernoctan en la calle a abandonar ésta, reconoció Gomà. "En estos casos es importante tener recursos para efectuar el traslado de forma inminente una vez se ha convencido al indigente", dijo ayer el concejal.

El Ayuntamiento de Barcelona distribuyó 74 contenedores de sal en varios puntos de la zona alta de la ciudad, habitualmente la más afectada por situaciones de nieve o hielo.

En Tarragona, el consistorio dio orden ayer a los servicios sociales de ofrecer alojamiento a los indigentes en la Casa de los Transeúntes o en pensiones, informa Oriol Aymí.

La asociación gerundense de transportistas por carretera Asetrans puso ayer a disposición de la Generalitat los 600 autocares de las empresas que tienen asociadas para trasladar a las personas afectadas en situaciones de emergencia, informa Gerard Bagué.

El Departamento de Salud teme que el brusco descenso de las temperaturas origine un rebrote de la epidemia de gripe, que ya había empezado a remitir en los últimos días, tras varias semanas de colapso en ambulatorios y servicios de urgencias.

El director del Plan Integral de Urgencias de Cataluña, Josep Mañach, reconoció que a pesar de que la afluencia de pacientes en ambulatorios y hospitales han descendido, la actividad era ayer todavía alta y faltaban camas en los hospitales. La mayoría de las personas afectadas por la gripe u otros problemas respiratorios que han requerido hospitalización en los últimos días son personas mayores con la salud muy frágil.

Para el próximo invierno, y con el objetivo de evitar la saturación que ha sufrido el sistema sanitario catalán desde principios de enero, la Generalitat prevé reforzar la atención domiciliaria dirigida a las personas mayores. El Departamento de Salud calcula que unas 100.000 personas podrían recibir atención en su domicilio sin requerir hospitalización.