500 muertos menos no es una estadística

Como es preceptivo en estos casos, Pere Navarro, director general de Tráfico, preparó una nota para el ministro del Interior, José Antonio Alonso, que había convocado una conferencia de prensa para anunciar los datos relativos a los accidentes de tráfico de 2004. En cuatro folios estaban resumidos los porcentajes más importantes, presididos todos ellos por una cifra mágica. La nota explicaba sucintamente este hecho: "En 2004 se han producido 513 muertos menos que el año pasado, es decir, un 12,7% menos de víctimas mortales". Así escrito, así leído, parecía tratarse de uno de tantos balances que se difunden con el Año Nuevo, porque todo es susceptible de entrar en la estadística comparada. Pere Navarro, sin embargo, no pudo evitar incluir alguna frase algo menos fría en los folios enviados al ministro. La frase, incluida en el capítulo de "reflexiones", decía: "Probablemente, ésta sea una de las mejores noticias, una de las noticias más importantes para el país desde hace muchos años".

"Empezamos a ver el problema del tráfico con la perspectiva de un país rico"

"El año 2004 ha sido muy intenso en debates, campañas y anuncios de medidas"

El balance de un siglo de tráfico en España es de 285.000 muertos y 16 millones de heridos

La frase no se divulgó. Como esta otra: "Hay quien dice que un muerto es un drama, y 500 muertos, una estadística. Hoy quisiera que valorásemos los 500 muertos menos como 500 dramas personales y familiares que, entre todos, hemos podido evitar".

Días después de la intervención de su ministro, Pere Navarro se sorprende de la relativamente escasa trascendencia que había tenido la noticia, como si se tratara de un dígito más de los muchos que inundan las páginas de los periódicos junto al descenso del paro, la subida del IPC, los dividendos de las empresas del Ibex 35 en el 2004..., como si fuera lo mismo tener menos parados que menos muertos. En la intimidad de su despacho, Pere Navarro se expresa sin rubor. Tiene ante sí aquellos folios que en su día envió al ministro. Y hace su propia lectura sin ningún formalismo.

"Mire", asegura, "esta cifra es tremenda. ¡500 muertos menos! ¡Es la mejor noticia del año y parece que ha sido una más! A nosotros nos ha sorprendido esta estadística y estamos analizándola, pero podemos decir una cosa: es un ejemplo de que estamos en una sociedad que está madura. Empezamos a ver el problema del tráfico con la perspectiva de un país rico. Además de tener calidad de vida, queremos conservarla. Nos empezamos a preguntar, ¿qué es esto de que cada día tengamos 15 muertos en las carreteras? Se ha abierto un debate desde hace un tiempo y empieza a rendir resultados. Hay un consenso y eso es muy importante. Los clubes de automovilistas se han movilizado y está el papel importante de las asociaciones de víctimas, porque su mensaje tiene mucha credibilidad. Todos los países con buenos resultados en reducción de víctimas tienen estas asociaciones. Ahora se puede decir que nos incorporamos a Europa".

Quinientos muertos menos. Ésa es la cifra mágica del año 2004. Una cifra que carece de una explicación única, que no responde a una exclusiva acción del Gobierno ni a una campaña publicitaria de efectos inmediatos.

"Se trata", añade Navarro, "de un descenso sólido, que se ha ido produciendo de forma estable a lo largo de todo el año, con el único punto negro del mes de octubre, donde el número de víctimas subió un 8,4% y no sabemos por qué. No responde a un plan, porque ese plan no está todavía en marcha. Claro está, se han hecho campañas y actuaciones porque no podemos decir a la sociedad: 'Mire usted, primero vamos a estudiar esto durante un año y luego vamos a hacer los planes'. Lo dice el manual, con estos muertos cada año no se puede hacer eso. Pero hay margen para lograr el objetivo". El objetivo es reducir los muertos en un 40% en 2008. Y eso significa mil muertos menos.

La cifra merece una explicación. En el año 2004 hubo 513 muertos menos en las carreteras españolas. Hubo también 418 heridos graves menos (21,57%) y 411 heridos leves menos (20,86%), a pesar de que aumentó en un 4% el número de coches, que se incrementó en 500.000 personas el número de conductores y que aumentó en un 3% la venta de combustible. Todas las variables que afectan al tráfico aumentaron menos una: los siniestros y las víctimas. Aun así, el asunto sigue siendo muy serio: en España perdieron la vida 3.516 personas durante 2004.

"Podemos decir que es un descenso acusado, que no es puntual, que se ha dado en todos los meses", explica Luis Montoro, catedrático de seguridad vial y director del Instituto Universitario de Tráfico de Valencia. "Se conduce como se vive, ésa es una gran enseñanza que nos dictan los estudios. La cifra ha bajado con más coches, con más conductores, con las mismas calzadas y con los mismos guardias civiles en las carreteras que hace 10 años. Así que podemos afirmar que lo que han cambiado han sido los comportamientos. Empezamos a ser una sociedad madura. Y aquí sí hay una serie de hechos puntuales que han producido un impacto directo e indirecto. Hay más movilización social, que afecta a los partidos políticos y a las diferentes asociaciones, hay campañas que han tenido efecto, hay un endurecimiento de las penas y hay proyectos que ya están teniendo efecto antes de ser aplicados, como es el caso del carné por puntos o de la instalación de 500 radares".

"El año 2004 ha sido muy intenso en debates, campañas y anuncios de medidas, y eso ha empezado a calar en la sociedad", afirma Antonio Lucas, responsable de seguridad vial del RACE. "Zapatero y Rajoy hablaron de tráfico durante la campaña. Incluso el Rey en su discurso mencionó el problema del tráfico. La sociedad ha vuelto la cabeza sobre este tema. El carné por puntos no ha entrado todavía en vigor, pero sus efectos ya se están notando".

Los expertos son cautos. Luis Montero dirige un instituto que coordina 60 investigaciones en materia de tráfico y "algunos de los datos de esas investigaciones", afirma, "le harían a usted llorar", refiriéndose a una encuesta que acaban de finalizar para la casa Audi sobre el comportamiento de los jóvenes al volante. Para él, la magnitud del problema es enorme. Por eso, habla difundiendo mensajes: "¿Sabe usted que el 51% de los conductores no conoce los niveles de alcoholemia? ¿Que el 50% no sabe cuánto es el tiempo de caducidad de unos neumáticos? ¿Que el 60% no sabe cómo llevar a un niño en el coche? ¿Que un 60% no sabe cómo funciona un ABS? ¿Sabe usted que a partir de 55 kilómetros por hora todo atropello es mortal y que la mitad de los peatones muertos son mayores de 65 años? Aún tenemos muchas lagunas y muchos porqués que resultan inexplicables".

"Cada muerto causa dolor en un entorno de 100 personas", explica Luis Montoro. Ha actualizado una estadística terrible: en un siglo, el tráfico en España ha ocasionado 285.000 muertos y 16 millones de heridos.

El ministro dio cuenta hace unos días del balance de los accidentes de tráfico en 2004. Difundió todo tipo de cifras y porcentajes, pero no leyó alguna frase como ésta: "Cuando se trata de salvar vidas, hay que ser ambicioso y utópico". Quinientos muertos menos no es una estadística.