Nuevo colapso en las urgencias del Ramón y Cajal al cerrar 189 camas por vacaciones

El intermitente colapso que sufren las urgencias de los hospitales públicos vivió ayer un nuevo episodio en el Ramón y Cajal, que a las 10.00 tenía 40 pacientes en los pasillos de sus urgencias y otros 59 pendientes de ingreso, según denunció CGT. Este sindicato criticó a la dirección porque, "pese a la gripe y a la saturación que sufren las urgencias desde hace un mes", ha cerrado por vacaciones 189 de las 1.100 camas del hospital, además de otras siete de las UCI y nueve de recuperación. El cierre empezó el 24 de diciembre y durará hasta el 10 de enero.

La dirección del hospital, ante la situación de las urgencias, decidió ayer abrir 27 de las 189 camas cerradas y no descarta "abrir un mayor número durante los próximos días, dependiendo de la demanda asistencial del servicio de urgencias", según un comunicado.

El hospital, indicó un portavoz, decidió cerrar 189 camas durante la Navidad "por el descenso de intervenciones quirúrgicas que se registra cada año en estas fechas". "Muchos pacientes no quieren operarse en navidades", explicó un portavoz del centro. Pero este cierre, además, sirve para que los empleados puedan tomar sus vacaciones y ahorra al centro el coste de nuevas contrataciones para suplir las bajas, según precisó la CGT.

El hospital sostiene, sin embargo, que el cierre de camas no tiene por qué afectar al servicio de urgencias. "Las camas que se cierran son las quirúrgicas; es decir, aquéllas donde son ingresados los pacientes después de ser operados. Las camas médicas, que son las que reciben a los pacientes de urgencias, no han sido cerradas", explicó un portavoz del hospital.

Este argumento fue rechazado por un responsable de la CGT. "Da igual una cama médica que una quirúrgica. Eso son argumentos de la gerencia para desviar la atención. Cualquier cama, en caso de necesidad, puede ser utilizada para ingresar a un enfermo de urgencias", explicó este responsable.

"Hoy mismo [por ayer] hemos visto lo contradictorio de la explicación de la gerencia: ha reabierto 27 camas quirúrgicas cerradas y no descarta abrir más para hacer frente al colapso de urgencias", continuó este responsable. "Lo que ha sucedido es que la dirección ha cerrado demasiadas camas y ahora tiene que rectificar sobre la marcha para arreglar el desaguisado que ha organizado en las urgencias", concluye la CGT.

El sindicato considera "especialmente grave" la decisión de cerrar 189 camas en unas fechas que están siendo muy complicadas para el Ramón y Cajal. Hace un mes, las urgencias del Ramón y Cajal ya sufrieron otro colapso, con más de 40 enfermos ingresados en los pasillos en las noches del 1 y 2 de diciembre.

El cierre del Ramón y Cajal es aparentemente contradictorio con el Plan Integral contra la Gripe 2004-2005, con el que la Consejería de Sanidad ha querido hacer frente a la incidencia de la enfermedad esta temporada. Sanidad afirmó el pasado 29 de diciembre que, de acuerdo con este plan, había abierto 636 camas de apoyo en hospitales públicos como la Cruz Roja para liberar a los grandes hospitales de la presión asistencial causada por la gripe y trastornos asociados.

La llegada de la gripe -Sanidad considera que desde el pasado 19 de diciembre la región ha rebasado el "umbral de actividad epidémica" del virus, con más de 90 casos por 100.000 habitantes- ha mantenido la presión asistencial sobre el Ramón y Cajal, pero "la situación se ha agravado ahora por este cierre excesivo de camas decidido por la gerencia del hospital para ahorrar costes en la contratación de más personal", critica la CGT.

No es el Ramón y Cajal el único hospital afectado por el descenso de las temperaturas y la llegada de la gripe. En las dos últimas semanas, otros centros, como La Paz, el Gregorio Marañón o el Clínico, también tuvieron que mantener durante horas a pacientes ingresados en los pasillos.

En atención primaria, los trastornos respiratorios y dolencias gripales también provocaron en el fin de semana del 24 al 26 de diciembre la saturación de los servicios de urgencias de los centros de salud de Vallecas y Moratalaz.