CC OO denuncia a la patronal de ambulancias por los sucesos en su sede
El sindicato Comisiones Obreras presentó ayer ante la Ertzaintza una denuncia contra los empresarios de ambulancias privadas de Guipúzcoa por los altercados registrados el miércoles ante su sede en San Sebastián. La patronal se concentró ante la sede de CC OO -luego hizo lo mismo ante las de ELA y LAB- para protestar por "los sabotajes" contra sus vehículos, de los que responsabiliza a los sindicatos y los empleados, en huelga indefinida desde el 22 de noviembre en demanda de convenio provincial.
El miembro de CC OO Gorka Albarado relató que los empresarios profirieron insultos y amenazas contra los trabajadores y sindicalistas y colocaron carteles en la entrada de la central, lo que motivó un enfrentamiento con los afiliados que fueron a retirarlos. La Ertzaintza, presente en las concentraciones, respondió advirtiendo a los sindicalistas que "se metieran en la sede o les metían", denunció Albarado.Los cooperativistas que integran las empresas de ambulancias replicaron que los momentos de tensión que se vivieron ante la sede de CCOO se produjeron como consecuencia del "intento de agresión" que sufrió uno de sus compañeros por parte de un miembro de este sindicato, al impedir éste la colocación de carteles informativos. Los altercados de ayer hacen que el conflicto laboral "se encone aún más", resaltó Albarado.
Sin embargo, y como "gesto de buena voluntad", los empleados suspenderán durante una semana la huelga de hambre que mantenían desde hace un mes y que ha obligado a muchos trabajadores a coger la baja médica por debilitamiento físico.
Con esta medida, pretenden lograr la reapertura de las negociaciones con la patronal, que el pasado lunes rompió las conversaciones debido a "los actos vandálicos" que están sufriendo sus vehículos.
Los sindicatos continuarán, en todo caso, con el paro indefinido que arrancó el 22 de noviembre y con manifestaciones "pacíficas". Hoy mismo realizarán una caravana de coches, mientras que los próximos días 3, 4 y 5 de enero tienen previsto celebrar sendas concentraciones en Rentería, Irún y la sede de Osakidetza en San Sebastián.
Llamamiento a Sanidad
Los empresarios consideran que la suspensión temporal del ayuno supone "un lavado de cara" de los trabajadores hacia la opinión pública, "una vez que han quedado en evidencia las tácticas utilizadas" por los trabajadores y sindicatos. En cualquier caso, admitieron que la postura de las centrales es "un primer paso" para tratar de reiniciar las negociaciones. "Si los empleados que están de baja empiezan a reincorporarse y la situación va tomando tintes de normalidad, no tendríamos problemas para sentarnos de nuevo a hablar", señaló un representante de la patronal.
En este momento, la subida de salarios es el principal escollo de la negociación, según apuntaron los sindicatos. Las centrales, por cierto, volvieron a reclamar ayer al Departamento de Sanidad, responsable último de los servicios de urgencias y encargado de contratar a las empresas privadas de ambulancias, que se sume a la mesa de conversaciones para tratar de desbloquear la situación.
[La Asociación de Empresarios de Guipúzcoa, Adegi, propuso ayer la reanudación de las negociaciones de la veintena de convenios colectivos que continúan paralizados en esta provincia y que afectan a unos 30.000 trabajadores de sectores como comercio y servicios, vídrio, cerámica, madera y mueble. La patronal culpó del bloqueo a "la nueva estrategia" de ELA y advirtió de las "graves" consecuencias que tendría la desaparición de estos convenios "históricos" para las pequeñas y medianas empresas y sus trabajadores].
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.