La valoración del sistema de salud por los usuarios cae más del 7% en ocho años

El Sistema Nacional de Salud empieza a acusar el desequilibrio entre fondos y demanda. Ésta es la principal conclusión del Informe Anual de 2003, que el Ministerio de Sanidad presentó ayer. Aunque la evaluación que le dan los usuarios sigue siendo cercana al notable, tanto la satisfacción con la atención primaria como la especializada y la hospitalaria han bajado más de un 7% entre 1995 y 2003. La causa para Sanidad está clara: mientras la población ha aumentado más del 2%, la parte de los presupuestos dedicada a atención sanitaria se mantiene en el 5,4% del PIB.

El Informe Anual del Sistema Nacional de Salud 2003 es el primero que realiza el Observatorio del Sistema Nacional de Salud, un organismo creado en la Ley de Cohesión y Calidad de 2003 con el objetivo de proporcionar "un análisis permanente" del sistema "en su conjunto", mediante "estudios comparados" de la "organización, servicios, gestión y resultados" de las comunidades autónomas. Las principales conclusiones de las 621 páginas del trabajo se exponen a continuación.

- Satisfacción. Los usuarios siguen "satisfechos" con el sistema, pero cada vez menos. La nota otorgada a la atención primaria ha bajado entre 1995 y 2003 un 7,07% (del 7,35 al 6,83 en una escala del cero al diez); la de las atenciones especializadas en consultas externas, el 8,05% (del 7,17 al 6,56) y la hospitalaria, un 8,42% (del 7,6 al 6,96). Si se observa la evolución desde 2002, año del fin de las transferencias a las comunidades, se aprecia una mejoría en casi todas las variables: información institucional, consultas externas, primaria y hospitalización. Sin embargo, el informe admite que todavía no se puede medir el impacto de la gestión por las autonomías.

- Listas de espera. Son la principal causa de descontento, tanto las diagnósticas como quirúrgicas, a lo que se suma la dificultad para conseguir cita en primaria, según el informe. El texto no da el detalle de los tiempos de demora por comunidades.

- Cobertura. Aunque el sistema se define como universal, todavía un 1% de la población no tiene acceso a él.

- Atención. De media, cada residente en España acude 5,5 veces al año a su médico, lo que arroja un total de más de 246.000 consultas de atención primaria. De ellas, más del 91% de las visitas fueron a médicos públicos, un porcentaje que baja al 83,3% cuando se trata de pediatras. Los especialistas atendieron casi 54 millones de consultas, y 3,3 millones de personas fueron ingresadas en un hospital. La estancia media en centros públicos fue de 8,7 días, lo que da un total de casi 29 millones de días ingresados. Los privados atendieron 1,5 millones de días, de los que la tercera parte fueron sufragados con fondos públicos. En 2003 se realizaron 2,3 millones de operaciones y 440.000 intervenciones de cirugía ambulatoria.

- Participación autonómica. El 89% de los 40.107 millones de euros gastados en sanidad fue gestionado por las comunidades autónomas. El resto corresponde a servicios locales (el 2%) y a la Administración central (el 9%). Las comunidades que tenían competencias antes de 2002 (Cataluña, Andalucía, País Vasco, Navarra, Canarias, Galicia y Comunidad Valenciana) aumentaron en 2003 su presupuesto en sanidad un 6,9% respecto a 2002. El resto lo hizo un 13% de media.

- Gasto farmacéutico. Frente a la congelación de la parte de los presupuestos destinada a salud, aumenta la que debe dedicarse a pagar medicamentos. Esta partida era el 16,41% del total en 1992, y ahora está en el 22%. Este aumento se ha hecho a costa, sobre todo, de la partida destinada a personal, que ha bajado siete puntos entre 1992 y 2002.

- Personal. En la mayoría de las provincias, el sistema público de salud es el mayor empleador. En total ocupa a 420.000 trabajadores, entre médicos, enfermeros, sanitarios y profesionales no sanitarios. De ellos, el 40,7% son mujeres, una proporción que supera el 50% en farmacéuticos y enfermeros. También los menores de 30 años son mayoritariamente mujeres.

- Gasto 'per cápita'. De acuerdo con el padrón del 1 de enero de 2003, el gasto representa un desembolso de 990 euros de media por persona y año.

- Gasto privado. La sanidad privada va ganando adeptos. Ya representa el 28,6% del gasto, por delante de Alemania, Francia, Italia y Reino Unido, donde es inferior al 24%. En España en 1992 sólo representaba el 22%.

- Buen estado de salud. En general, "la población española goza de una buena salud", según el informe. Indicadores que lo demuestran son la mortalidad infantil (3,6 fallecidos por cada mil nacidos vivos, la segunda más baja de Europa después de Suecia) o la esperanza de vida al nacer (76,1 años en varones y 82,8 en mujeres). La tasa de mortalidad está en el 8,8 por mil habitantes.

- Desigualdades. Este buen panorama "oculta diferencias importantes por género, por territorios o por clase social". Otra fuente de desigualdad son las prestaciones que unas comunidades han añadido a su cartera de servicios, o la posibilidad de elegir médico, que se reconoce en algunos lugares.

Tampoco todas las comunidades tienen regulado el testamento vital.